Un muerto y un herido grave por una explosión de fuegos artificiales

Un trabajador de una empresa pirotécnica resultó ayer muerto a causa de la explosión de un cargamento de fuegos artificiales que preparaban con motivo de unas fiestas en Santiago del Teide, municipio al suroeste de la isla de Tenerife, con unos 9.500 habitantes. En el mismo accidente, otro trabajador resultó herido de gravedad y ha sufrido la amputación de ambas piernas, además de presentar un cuadro grave a causa de distintas lesiones en todo el cuerpo.

Los trabajadores de la empresa Pirotecnia Canarias se habían desplazado para realizar un montaje de fuegos artificiales con motivo de la romería del Cristo en el barrio conocido como Los Baldíos, en Santiago del Teide, muy popular en todo el sur de la isla. En un momento determinado de la mañana y por razones aún no conocidas, los fuegos prendieron cuando los dos trabajadores estaban en mitad de la carga, informó a este periódico un empleado de un hotel de Playa La Arena, la famosa cala tinerfeña con bandera azul europea.

Uno de los trabajadores falleció en el acto. Su compañero sufrió dos cortes profundos en el abdomen y perdió sus piernas. Los equipos sanitarios lo atendieron unos minutos hasta la llegada de un helicóptero de emergencias, que lo trasladó hasta un hospital de la isla, donde permanece ingresado con pronóstico grave.

Aunque no son frecuentes, los accidentes vinculados con la industria pirotécnica se han sucedido en alguna ocasión anterior en Canarias. En esta misma romería, un suceso similar produjo numerosos heridos hace 10 años.

La empresa Pirotecnia Canarias tiene su sede en Los Realejos (norte de Tenerife), donde las calles del Medio y el Sol rivalizan en la espectacularidad de sus fuegos artificiales desde 1770, cuando en El Medio vivían las clases acomodadas, frente a las más modestas del Sol.