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El primer aparthotel promovido en Euskadi abre sus puertas en Bilbao

La reconversión de un edificio semiindustrial de Bilbao ha costado 12 millones de euros

Un notario, un ejecutivo y un baserritarra de Mungia son algunos de los compradores de los apartamentos de lujo del Edificio Santiago, el primer aparthotel del País Vasco. Ellos integrarán en el centro de Bilbao una comunidad de vecinos muy particular, con recepcionista, consulta médica diaria, cafetería y gimnasio, entre otros servicios. El edificio, de antiguo carácter semi-industrial sido objeto de una reforma integral en la que se han invertido 12 millones de euros.

En un mes se han vendido 20 de los 35 apartamentos del edificio, situado en el número 12 de la calle Licenciado Poza, cuyos precios oscilan entre los 306.000 euros que cuesta la vivienda más pequeña -de 50 metros cuadrados- hasta los 511.000 euros que hay que pagar para disfrutar de uno de los áticos exteriores, de 85 metros cuadrados.

Un amplio vestíbulo de mármol da entrada al apartohtel, que cuenta en su planta baja con la recepción, que funcionará las 24 horas, una cafetería y una amplia terraza ajardinada, de 250 metros cuadrados. La venta de los 35 apartamentos la lleva de forma exclusiva el asesor inmobiliario Paulino Martín, conocido por haber participado en gran parte de las operaciones de venta y alquiler de los locales de la llamada milla de oro bilbaína, con firmas como Inditex, El Corte Inglés o Custo Barcelona.

"La mayoría de los compradores es gente mayor, que valora mucho los servicios con los que cuenta el edificio. Algunos de ellos han decidido vender su casa en el centro, porque con los hijos ya mayores no necesitan una vivienda de 150 o 200 metros cuadrados y comprar aquí un apartamento. Pero también han adquirido apartamentos un ejecutivo que sólo lo usará seis meses, y otras personas, como inversión", explica Martín.

Ya decorados

Los que primero se han vendido son los más pequeños, algo habitual en el mercado inmobiliario. Su mayor demanda se penaliza con un precio más caro, 6.120 euros el metro cuadrado en este caso.

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Las viviendas cuentan con cocina y baño equipados, armarios, y moqueta, e incluyen cortinas y ropa de cama. Se pueden comprar ya decorados y elegir entre los cinco estilos que se ofrecen, del más moderno y minimalista al más clásico y adornado.

Por 225 euros al mes, los propietarios cubrirán los gastos de personal y de mantenimiento del todo edificio y dispondrán de recepción las 24 horas del día, servicio de limpieza, consulta médica y fisioterapéutica, cafetería con servicio a los apartamentos, un enorme solario, gimnasio y una terraza que, gracias a los toldos, se podrá disfrutar todo el año.

La calificación del solar donde se asienta el Edificio Santiago ha condicionado toda la operación inmobiliaria. El empresario Vicente Bilbao, propietario de la Casa Vasca, compró en 2000 el edificio, que era un garaje de varias plantas y estaba (y está) calificado como de equipamientos y servicios. La imposibilidad de conseguir la recalificación del solar para construir viviendas, que era la idea inicial, dio paso al proyecto de levantar un aparthotel, el primero de Euskadi, según sus promotores.

El procedimiento de compra también es peculiar. La adquisición de los apartamentos se realiza a través de la compra de un paquete de acciones de la sociedad Poza 12, propietaria del inmueble, por un importe proporcional al precio de la vivienda. Tras la compra de acciones, los titulares de los apartamentos pueden habitarlos, venderlos o alquilarlos.

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