Las fuertes tormentas anegan diferentes zonas de Basauri y Orduña

El Departamento de Interior levantó en la tarde de ayer la alerta por el riesgo de inundaciones en varios municipios de la cuenca del Nervión que mantuvo durante cerca de ocho horas en siete municipios vizcaínos y otro alavés. Los más afectados fueron Basauri, con algunas calles anegadas por las precipitaciones, que llegaron a alcanzar los 70 litros por metro cuadrado, y Orduña. Interior no espera hoy más problemas al mejorar el tiempo.

Las lluvias se cebaron de forma especial en la comarca del Alto Ibaizabal, entre Llodio y Zeberio, después de una noche de lunes con precipitaciones intensas. Los problemas se suscitaron ya desde primeras horas de la madrugada de ayer, lo que llevó a Interior a declarar oficialmente la alerta por riesgo de inundaciones en Llodio, Bilbao, Arrankudiaga, Miraballes, Zaratamo, Arrigorriaga, Basauri y Zeberio.

Basauri fue la población más afectada, aunque su alcalde, el peneuvista Rafael Ibargüen, afirmó que los problemas vinieron no por el desbordamiento del Nervión, sino debido a la saturación de colectores y alcantarillas. La calle Fernando Barquín de esa localidad quedó inundada a primera hora de la mañana con daños en garajes y lonjas. Dos coches fueron arrastrados por el agua, aunque el alcalde afirmó que se debió a que sus propietarios se negaron a sacarlos del garaje en que se hallaban.

Vecinos de esta calle atribuyeron las inundaciones al mal funcionamiento de un colector de saneamiento construido recientemente por el Consorcio de Aguas Bilbao-Bizkaia, informa Efe.

El alcalde de Basauri manifestó que las inundaciones no han perjudicado gravemente a la zona industrial del municipio, aunque reclamó al Gobierno la ejecución inmediata del proyecto de encauzamiento de los ríos Nervión e Ibaizabal. "Todo nuestro tejido industrial depende de que una inundación pueda paralizar la actividad, con el perjuicio que ello supone para nuestra economía", dijo.

Pocos problemas en Bilbao

En Bilbao se movilizaron más de 70 personas, entre policías locales, bomberos y empleados del área de obras y servicios, pero no se registraron afecciones significativas. Los mayores problemas se localizaron en la calle Peñascal, cuando el caudal del Nervión arrastró piedras a gran velocidad. Hubo actuaciones para achicar agua o corrimientos de tierras en Basurto, Zorroza y Miribilla.

Orduña sufrió, a causa de la crecida del Nervión, la anegación de las piscinas municipales y un campo de fútbol que fue inaugurado en septiembre. A media tarde, las instalaciones seguían todavía inundadas y los responsables municipales temían daños en la maquinaria de las piscinas. En la zona entre Vitoria y Llodio se registraron, hasta el mediodía, precipitaciones de 50,4 litros por metro cuadrados. Sin embargo, los embalses del Zadorra, que hace unas semanas tuvieron que abrir sus compuertas, se encontraban en una situación normal, al 85% de su capacidad de almacenamiento. En Álava, se registraron pequeños cortes de carretera en Valdegovia y Cuartango por desbordamientos.

El Departamento de Interior levantó sobre las cuatro de la tarde la alerta por riesgo de inundaciones que había declarada a las ocho de la mañana ante la predicción de que el tiempo mejorará y el descenso del nivel de los ríos. De esta manera, quedó descartada la extensión de los problemas al valle de Arratia como apuntaban las previsiones meteorológicas a primeras horas de la mañana.

La Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet, prevé para hoy una mejora significativa, especialmente por la tarde. Las precipitaciones se localizarán en la costa guipuzcoana. El viento será todavía del norte aunque las temperaturas subirán, sobre todo las máximas, que se situarán entre los 16º y los 19º todo el País Vasco.