Escola Valenciana pide el requisito lingüístico para la Administración a Antoni Bernabé

La Federació d'Associacions per la Llengua-Escola Valenciana ha solicitado por carta al delegado del Gobierno, Antoni Bernabé, una entrevista en la que defenderá el establecimiento del requisito lingüístico "para ciertos puestos de la Administración".

La federación asegura venir observando "con preocupación los hechos que se están sucediendo últimamente", en referencia a casos como el del menor detenido en Xàtiva a finales de abril, debido, según el chaval, a que respondió en valenciano a los agentes del Cuerpo Nacional de Policía.

Las reacciones que siguieron al suceso incluyeron la apertura de un expediente informativo por parte de la policía, y la exigencia de explicaciones al Ministerio del Interior realizada por el consejero Portavoz, Esteban González Pons, que aprovechó para calificar de "errática" y "descentrada" la política lingüística del PSOE.

Escola Valenciana opina que la solución a lo que considera "agresiones lingüísticas de la Administración" pasa por mejorar "la competencia lingüística" de sus trabajadores. Aparte de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía, cuyos requisitos de admisión corresponden al Ministerio, un portavoz de la federación citó ayer a los secretarios de los ayuntamientos, figura también regulada por la legislación nacional, y cuyo desconocimiento del valenciano plantea "problemas" cuando un regidor opta por hacer uso de la lengua.

Multas sin pagar

Las dificultades de los valencianohablantes no se limitan a su trato con los funcionarios dependientes del Gobierno. Escola relata la peculiar denuncia de un vecino de La Vila Joiosa (La Marina Baixa), multado hace unos meses por estacionar indebidamente en la vía pública. El hombre recibió la correspondiente comunicación sólo en castellano, y solicitó que le fuera reenviada en valenciano. "Durante semanas", sostiene la federación, "el Ayuntamiento hizo caso omiso a las continuas peticiones y reclamó el cobro de la sanción".

Demasiado tarde, seis meses después de la primera petición del denunciado el Consistorio le hizo llegar una versión lingüística. Para entonces la sanción había prescrito.

Escola Valenciana considera que la capacidad de los trabajadores de la Administración para entender el valenciano es necesaria para "construir una sociedad más tolerante"; para que se cumpla "el respeto hacia la diversidad lingüística", y para que nadie "sea discriminado" por utilizar una lengua oficial, tal y como establecen el Estatuto de Autonomía y la Constitución Española.

La federación, que plantea la entrevista con Bernabé con una "finalidad constructiva", afirma observar, también "con preocupación", "la utilización política de los últimos sucesos por parte del Consell".