"Hablamos de parejas de hecho"
Cuando el ex presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) Juan Fernández-Armesto lee la frase "cónyuge o persona con análoga relación de afectividad", interpreta que la ley quiere referirse a las parejas de hecho. Y le parece lógico.
Sin querer entrar en si las palabras escogidas por el legislador español son afortunadas o no, Fernández-Armesto subraya que "el derecho reconoce ya en muchos ámbitos estas situaciones" -pone como ejemplo la ley de arrendamientos urbanos-, por lo que es "muy razonable" que también les imponga obligaciones. "Lo contrario sería una inducción a no casarte", sentencia.
Este jurista, bajo cuyo mandato se aprobó el primer código español de buen gobierno de las sociedades cotizadas, subraya además que la polémica desatada en España tiene un origen internacional que escapa del alcance del Ministerio de Economía y de la CNMV, que han desarrollado la normativa al respecto: las normas internacionales de contabilidad, que son obligatorias para todos los grupos cotizados europeos desde el 1 de enero. "Estas normas son universales y no admiten discusión".
Por eso para Armesto, la polémica tiene más que ver con el morbo que con la realidad: "No es previsible que pase nada porque la mayoría de las empresas tienen códigos de conducta para sus consejeros" que les dicen cómo resolver sus conflictos de interés. Además, continúa, todas las operaciones vinculadas tienen que ser aprobadas por el consejo de administración.
Para Armesto lo importante es que todas las operaciones vinculadas -las de los consejeros, directivos, accionistas, etcétera- se hagan públicas, sean sometidas a un régimen de transparencia para evitar abusos.
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