El presidente del Gobierno canario destituye a los tres consejeros populares
Coalición Canaria, en minoría en el Parlamento, rompe con diez años de pactos con el PP
El presidente del Gobierno de Canarias, Adán Martín Menis (de Coalición Canaria), destituyó ayer a los consejeros de Inmigración, Presidencia, e Industria, los tres adscritos al PP. Esta crisis rompe una tradición de 10 años de entendimiento entre nacionalistas y populares. Martín Menis explicó que la raíz de la disputa hay que buscarla en la oposición frontal del los consejeros del PP con el PSOE, lo que impide llegar a acuerdos con el Gobierno central de José Luis Rodríguez Zapatero. En 15 días se nombrarán tres nuevos consejeros de CC.
A juicio del presidente canario, la consecución de objetivos clave para las islas debe lograrse "conjuntamente con el Gobierno español, sea cual sea su color político". A este respecto, reveló que no hay "ni una sola frase que condicione el acuerdo entre el PP y Coalición Canaria en las islas a que el Gobierno de España sea del PP". Y añadió: "Canarias habrá de conseguir sus objetivos en todo caso, con cualquier Gobierno; son demasiados asuntos clave como para que se intenten dinamitar desde dentro del propio Gobierno", en referencia a los tres consejeros populares. De esta forma, y a fin de no crispar aún más las relaciones entre el Gobierno central y el canario, el presidente canario ha optado por prescindir del PP en su Gobierno regional.
Las críticas del PP canario al Gobierno central se han referido en especial a asuntos de competencia estatal cuya negociación es clave para los nacionalistas: inmigración, infraestructuras, sanidad, delimitación de aguas, desarrollo fiscal, financiación autonómica, relaciones con Marruecos y reforma del estatuto. Tanto el presidente del PP en Canarias, José Manuel Soria, como los otros miembros del PP con responsabilidades públicas, han acusado al Gobierno central de practicar un "boicot" a las islas. A juicio de Martín Menis, esta situación ha llevado a la relación entre CC y PP a un callejón sin salida.
Esta misma semana, Martín Menis pronunció una frase definitoria: "Los consejeros de mi Gobierno son antes consejeros que miembros de un partido político y su primer interés deberá ser la defensa de los intereses de Canarias". A fin de explicar esta crisis, el presidente ha solicitado una comparecencia urgente ante el Parlamento regional.
En una declaración institucional leída en la que no permitió preguntas, Martín Menis justificó ayer su decisión en "el deterioro de la confianza" entre nacionalistas y populares desde la firma, en 2003, del último pacto. El presidente canario reveló haber mantenido con José Manuel Soria una reunión el domingo pasado. Según Martín Menis, la conversación entre ambos acabó con la promesa del líder de los populares de salir del Gobierno el miércoles pasado, circunstancia no se produjo.
Composición parlamentaria
El parlamento regional canario fruto de las elecciones autonómicas de 2003 se compone de la siguiente manera: 23 diputados de Coalición Canaria; 17 del PP; 17 del PSOE; y tres del grupo mixto (independientes de Lanzarote). De esta manera, Coalición Canaria gobernará desde ahora en minoría.Con esta resolución, según el presidente del Gobierno canario, éste "aumentará su eficacia".
De cualquier forma, el jefe del Ejecutivo de las islas alabó la labor de los tres consejeros destituidos. Éstos son Águeda Montelongo (Inmigración, Empleo y Asuntos Sociales); María María Australia Navarro (Presidencia, con competencias en Justicia, Seguridad y emergencias); y el hermano del líder del PP, Luis Soria (Industria, Comercio y Nuevas Tecnologías).
Por su parte, José Manuel Soria aseguró ayer que la ruptura del pacto con los nacionalistas se produce porque el presidente "ha renunciado a defender los intereses de Canarias". Soria añadió que Adán Martín es y será engañado "una y otra vez" por el presidente del Gobierno español, quien a su juicio, ha chantajeado al Ejecutivo insular. "Son los consejeros del PP los que defienden alto y claro a Canarias frente a los desmanes y desprecios de Zapatero con el Archipiélago", manifestó tras conocer que los consejeros habían sido destituidos del Gobierno canario. Soria añadió que seguirá defendiendo "con la misma intensidad" los intereses de Canarias "ante un gobierno de la nación que está dando un trato indigno a esta región".
El presidente del PP apostó por la defensa de la estabilidad del Gobierno horas antes, durante su comparecencia tras la ejecutiva regional del PP, que decidió poner en manos de Martín Menis la continuidad o no del pacto.
Una situación esquizofrénica
Al presidente del Gobierno canario, Adán Martín Menis, de Coalición Canaria, no le ha resultado fácil gobernar estos 22 meses en coalición con el PP. El presidente de los populares en las islas, José Manuel Soria, ha ejercido como un auténtico presidente en la sombra y sus directrices eran cumplidas marcialmente por los tres consejeros del PP en el Consejo de Gobierno canario y otros cargos en cabildos y ayuntamientos. Aunque las críticas de los populares al Gobierno central comenzaron tras el resultado electoral del 14-M, varios asuntos han tensado las relaciones entre los socios en el Gobierno de las islas hasta hacerlas insostenibles en las últimas semanas.
La principal fractura entre nacionalistas y populares se produjo por el concurso de ideas para el istmo de Las Palmas de Gran Canaria, que el PP bautizó como La Gran Marina. Declarado ilegal por Bruselas, el Ministerio de Fomento y el Consejo de Estado por no permitir la concurrencia de arquitectos de las islas, Soria y la alcaldesa de Las Palmas, Josefa Luzardo, elevaron el tono de sus críticas al nuevo gobierno socialista hasta decir que el único objetivo de Madrid era machacar a la capital grancanaria.
Frente a ellos, Coalición Canaria, PSOE, grupos empresariales, sindicatos y asociaciones vecinales defendieron la necesidad de un concurso para el istmo "dentro de la legalidad vigente".
La campaña del PP incluyó la contratación con fondos municipales de decenas de miles de pulseras de plástico, que se distribuyeron en calles y a través de todos los periódicos de la capital -excepto en uno de los más vendidos y leídos, el Canarias7, por discrepancias con su línea editorial-. La reunión del presidente canario en La Moncloa hace semanas, el acuerdo en la financiación estatal de infraestructuras en las islas, y las promesas del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, al portavoz de CC en el Congreso, Paulino Rivero, en el debate del estado de la nación, en algunas cuestiones como inmigración, evidenciaban las buenas relaciones entre nacionalistas y socialistas. Y recibieron duras críticas desde el PP, a la vez sentado con CC en el Gobierno de Canarias.
Esta situación esquizofrénica estalló ayer.
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