Burriel no consigue que los ediles socialistas de Alicante rectifiquen su apoyo al plan Rabassa

El PSPV mantiene sus diferencias en torno a la decisión de su grupo municipal del Ayuntamiento de Alicante de apoyar el plan Rabassa -programa urbanístico, impulsado por PP, que prevé construir 15.000 viviendas fuera del PGOU-. En una tensa reunión celebrada ayer, el secretario nacional de Acción Territorial, Eugenio Burriel, no reunió el consenso interno suficiente para que los ediles rectifiquen su apoyo al plan. La cúpula socialista respaldó públicamente al grupo municipal frente a la ejecutiva local y dejó en manos de los concejales la decisión final.

Macià dice que el partido respetará la decisión del grupo, "si no es un disparate"

La dirección nacional de los socialistas valencianos intentó ayer sin éxito cerrar la crisis abierta en el seno del PSPV de Alicante tras el voto afirmativo de los concejales al programa urbanístico de Rabassa. Los ediles socialistas apoyaron inicialmente el plan, que impulsa el equipo de gobierno local, en manos del PP con mayoría absoluta, en el mismo pleno en el que se acordó una subida de sueldos para los concejales.

Los dirigentes nacionales del PSPV, Antoni Such, Diego Macià y Eugenio Burriel, mantuvieron "una tensa reunión" -en palabras de uno de los asistentes- de más de tres hora de duración con los concejales, liderados por el portavoz, Blas Bernal, y el ex senador Ángel Franco, y el secretario general local, Juan Antonio Román. Éste desató la crisis al denunciar el respaldo de los concejales al programa urbanístico ante la dirección federal, en concreto al secretario de Política Municipal, Álvaro Cuesta. El dirigente federal envió una carta a su homólogo del PSPV, Antoni Such, instándole a que abriera una investigación y revisará la posición final del grupo ante el proyecto.

Finalmente, la dirección federal ha desistido de su propósito y ha dejado en manos del PSPV la resolución de la crisis, que se abordó sin éxito en la reunión de ayer. Los concejales mantuvieron su argumento de que su voto favorable permite -debido a la incorporación de una enmienda a la moción del PP- abrir un período de alegaciones para introducir modificaciones. Ésta fue la defensa esgrimida por Bernal en la rueda de prensa ofrecida al término de la reunión.

La postura más crítica hacia el grupo la enarboló el responsable del área de Urbanismo de la dirección del PSPV. Burriel censuró a los ediles el apoyo al plan, máxime tratándose de una iniciativa del equipo de gobierno del PP. El dirigente socialista también se mostró partidario de un cambio del voto de los ediles socialistas una vez transcurra el período de alegaciones y se someta a la consideración del pleno. Burriel no logró el suficiente consenso interno a su iniciativa y en la rueda de prensa posterior también se mostró conciliador y respetuoso con la decisión que finalmente adopte el grupo.

Diego Macià, presidente nacional del PSPV, fue el que públicamente ofreció un respaldo más nítido a la autonomía del grupo municipal respecto al programa urbanístico. "El voto final, en función de las mejoras finales que se produzcan, será una decisión del grupo municipal", dijo Macià. "El partido respetará la decisión, siempre que esté argumentada y no planteen [los concejales] un disparate", añadió.

Con el apoyo público al grupo, el presidente del PSPV desautorizó tácitamente al secretario general local, Juan Antonio Román. No obstante, éste rechazó ese extremo. "Mi postura sobre el plan Rabassa no ha cambiado y tampoco me siento desautorizado", sentenció. Con todo, el máximo dirigente local también dejó entrever que su postura final puede variar en "función de las conclusiones y mejoras al proyecto que se deriven del debate público", matizó.

En la resolución oficial de un nuevo rebrote de la crisis de los socialistas alicantinos se ha impuesto la tesis del secretario de Organización del PSPV, Vicent Sarrià, partidario de respaldar públicamente al sector mayoritario, el liderado por Bernal y el ex senador Franco. En esta línea también se ha expresado el secretario de Política de Relaciones Institucionales, Antoni Such. Éste abandonó la reunión una media hora antes de su conclusión para asistir a una mesa redonda en al Universidad de Alicante.

Franco, ex secretario local del PSPV de Alicante hasta hace un año, cuando fue sustituido por Román, ha controlado la mayoría en la agrupación local en la última década.