El Ayuntamiento de Sevilla estudia la instalación de una noria panorámica en el Prado de San Sebastián
Una empresa británica pide la concesión de suelo por un año con opción a prórroga
Una empresa británica se ha dirigido al Ayuntamiento de Sevilla para ofrecerle la instalación de una gran noria panorámica que sirva como mirador de la ciudad. La compañía World Tourist Attractions, que explota las norias gigantes de Londres y Birmingham, ha ofrecido dos ubicaciones, el Muelle de la Sal y el Prado de San Sebastián, aunque el Ayuntamiento considera más adecuada la segunda. La empresa quiere que la atracción esté en marcha este verano y asegura que la noria, de 60 metros de altura, creará 30 puestos de trabajo directos y apenas generará ruido.
World Tourist Attractions ha contactado con el Ayuntamiento a través de unos de sus socios, el equipo de abogados Lexland, con sede en la ciudad. Fuentes municipales aseguran que el plan especial de patrimonio permite su instalación en los dos lugares seleccionados por la empresa: el Muelle de la Sal (debajo del Paseo de Colón) y en el centro de los jardines Prado de San Sebastián.
No obstante, el Ayuntamiento se decanta claramente por el Prado. La atracción está ya montada en unos contenedores en el puerto de Amsterdam a la espera de que el gobierno municipal de el visto bueno. Según estas fuentes, la idea ha gustado en el Ayuntamiento, que tiene que decidirse en los próximos días porque los promotores estan interesados en empezar la instalación a finales de mayo para que la noria esté en marcha antes del verano.
La atracción necesita un espacio de 625 metros cuadrados para poder funcionar correctamente. Esta sería la superficie de suelo que cedería el gobierno municipal a la empresa a cambio de un canon anual que todavía no está fijado. Su precio dependerá en gran medida del coste que se fije para el billete. En Londres y Birmingham, subirse a la noria cuesta entre 12 y 15 euros por persona, pero el Ayuntamiento y la empresa coinciden en que en el caso de Sevilla habría que rebajar de forma la tarifa para adaptarla al nivel de vida medio, más bajo que el británico.
La instalación de la noria no necesita obra, sino que ésta se fija sobre unas cubas de agua que ejercen de contrafuerte. La concesión, de llegar a firmarse, será por un año con opción a prórroga. En los 625 metros cuadrados, se ubican tanto la noria como una pequeña tienda y un bar. La compañía garantiza que entre los tres elementos generan 30 puestos de trabajo.
La noria que ya está montada en Amsterdam tiene 60 metros de altura (similar a la Torre Panorámica Schindler de la Expo 92) y capacidad para unas 300 personas, distribuidas en 30 cabinas de 10 plazas. Cada paseo dura media hora y la idea es que funcione hasta las 23.00. Un informe encargado por la compañía a la empresa Trim Acustics señala que la atracción no es ruidosa. Según este estudio, el nivel de contaminación acústica alrededor de la noria de Birmingham es sólo tres decibelios más alto cuando la atracción está apagada que cuando está en funcionamiento. Fuentes municipales aseguran que el gasto de energía eléctrica tampoco es un obstáculo.
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