Detenido cerca de Vic un empresario que almacenaba 750 kilos de explosivos
El ministro del Interior afirma que "no parece" que tenga relación con actividades terroristas
La Guardia Civil investiga el origen y uso del arsenal que encontró en una casa de Gurb (Barcelona): 750 kilos de Goma 2, 5.312 detonadores eléctricos y 500 metros de mecha lenta. Los explosivos fueron hallados en el garaje del domicilio de Antonio D. M., arrestado el martes por la noche y que ayer permanecía en la comandancia de la Guardia Civil de Sant Andreu de la Barca. El detenido, artificiero civil, poseía una pequeña empresa que realizaba voladuras para obras de la construcción. El ministro del Interior, José Antonio Alonso, explicó que el hecho "no parece" tener relación con actividades terroristas.
De hecho, los investigadores se inclinaban por la hipótesis de que probablemente el detenido, por su profesión de artificiero civil, fue acumulando el material durante años. El Ministerio del Interior abrió un expediente sancionador y la Guardia Civil optó por agotar el periodo legal de detención antes de trasladar al arrestado al Juzgado de Instrucción número 4 de Vic.
La Guardia Civil detuvo a Antonio D. M., de 50 años, cuando llevaba 33 cartuchos de Goma 2 en una bolsa en el maletero de su coche. En el registro posterior de su casa se encontró el resto. La Goma 2 se encontraba en mal estado, según los investigadores, y en un lugar muy inadecuado, según coincidieron en señalar tanto los investigadores como el alcalde de la localidad de Gurb, Joan Roca, ya que el garaje está muy próximo a un colegio. "De haber explotado, se habría podido producir una gran tragedia", apuntó uno de los miembros del GEDAX de la Guardia Civil después de trasladar el material al polvorín del Bruc, informa Efe. Los vecinos conocían la actividad del detenido y suponían que guardaba algún material en su casa, pero no tanto.
Además de los explosivos, los detonadores y dos rollos con 500 metros de mecha lenta, los agentes encontraron ocho rollos de línea de timbre de conexión, 15 sacos con 750 kilogramos de nitrato amónico granulado con un contenido del 33,5% de nitrógeno y 75 litros de gasóleo.
Fuentes de la investigación consideran que el artificiero civil acumuló buena parte de ese material durante los últimos 13 años, tiempo en el que ejerció realizando voladuras en obras y canteras, actividad por la que disponía de autorizaciones para adquirir explosivos. Estos permisos le fueron retirados ayer.
Los agentes concentraban ayer sus averiguaciones sobre el origen de los explosivos siguiendo las inscripciones de control de cada cartucho, el uso que pudo dar el artificiero al material y si en alguna ocasión comerció con él o intentó hacerlo. Una de las hipótesis es que el detenido facilitara pequeñas cantidades de explosivos a otros profesionales del ramo.
Tras el robo de explosivos en Asturias para cometer el atentado del 11-M (por el que está imputado el ex minero José Emilio Suárez Trashorras), las fuerzas de seguridad han incrementado los controles. De hecho, fuentes de la Guardia Civil explicaron ayer que la detención de Antonio D. M. se había producido en el marco de la campaña que el Ministerio del Interior puso en marcha el pasado mes de septiembre para reforzar el control de las explotaciones, industrias y empresas que utilizan explosivos.
Durante una de estas inspecciones, la Guardia Civil recibió información de que una persona relacionada con explosiones en obras civiles podría estar haciendo acopio ilegal de material explosivo, lo que originó la investigación que culminó con la detención del artillero y la incautación de los explosivos.
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