Schröder pide a las empresas más empleo a cambio de menos impuestos
El canciller alemán, Gerhard Schröder, exigió a las empresas que comiencen a crear empleo en lugar de hablar de recortes de plantilla y deslocalizaciones. Schröder quiere que las empresas contribuyan a impulsar la economía alemana como contrapartida a la reducción del impuesto de sociedades.
"Las condiciones son propicias. Por eso deberían dejar de hablar tanto de deslocalizar fábricas y puestos de trabajo e invertir en Alemania. Eso es lo que espero de la industria alemana", declaró Schröder al dominical Bild am Sonntag. Este mes se espera en Alemania otro récord de desempleo, después de que febrero registrara 5.216.000 parados, un 12,6% de la población activa, que es la cifra más alta desde la II Guerra Mundial.
Schröder tiene motivos para exigir algo a cambio, después de que hace dos semanas anunciara una rebaja del impuesto de sociedades del 25% al 19% y otras medidas que contribuirán a que la presión fiscal de las empresas se reduzca del actual promedio del 38%. "Con las reformas de la Agenda 2010 hemos creado unas condiciones inmejorables para las empresas alemanas. Hemos bajado los impuestos a ciudadanos y empresas. Hemos reducido los costes laborales. Hemos eliminado obstáculos a la creación de empleo. Como resultado las empresas alemanas son más competitivas que nunca", destacó el canciller.
La indignación por la avaricia de algunas empresas alemanas no es nueva. Schröder ya criticó al Deutsche Bank cuando, en enero, comunicó un aumento de sus beneficios en 2004 del 86,5% con respecto al año anterior y anunció en el mismo acto el recorte de 6.400 empleos.
Más ejemplos
El Bild am Sonntag menciona también los ejemplos de la compañía de seguros Allianz (+16,4% de beneficios, -6,66% de empleos) y el fabricante de camiones MAN (+68,23% de beneficios, -4,52% de empleos). Las 30 empresas que componen el índice bursátil Dax duplicaron sus beneficios en 2004 y, sin embargo, eliminaron 35.000 puestos de trabajo, mientras que crearon 9.000 empleos fuera del país, según un estudio del diario berlinés Der Tagesspiegel.
Esto se une a la irritación que hay en Alemania por los astronómicos sueldos de los integrantes de los consejos de administración. El Gobierno va a obligar a las empresas a publicarlos en la presentación de resultados cada año.
Algunos presidentes de compañías de seguros de enfermedad desataron el mes pasado la ira de la prensa popular alemana al saberse que se habían aumentado el sueldo. Al borde de la quiebra hasta el año pasado, si estas compañías pudieron sanear sus cuentas fue gracias a la introducción de una cuota de 10 euros por visita y trimestre que los asegurados tienen que pagar cada vez que van al médico.
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