_
_
_
_

Fomento repesca el plan de Cascos para unir por tren el aeropuerto con Chamartín

La Comunidad ve prioritario enlazar por metro las dos terminales de Barajas

El Ministerio de Fomento saca hoy a información pública el borrador del proyecto de construcción de una línea de cercanías de ocho kilómetros (la mitad, en túnel) entre Chamartín y la nueva terminal del aeropuerto de Barajas. Hacer esa línea férrea (que no estará lista antes de 2012) costará a las arcas públicas 196 millones. El aeropuerto ya está comunicado con la ciudad por la línea 8 de metro, pero ésta sólo llega a la terminal actual. Ampliarla hasta la nueva terminal costaría menos de la tercera parte de lo que costará el tren. Sin embargo, el ministerio ya ha dicho que no pagará esa obra porque no es de su competencia, y la Comunidad, que es la competente para hacer el metro, también se niega.

Más información
El proyecto fue impulsado por el ex ministro Cascos, y el PSOE lo tachó entonces de "despilfarro"

Madrid está comunicado con su aeropuerto por metro desde mayo de 2002, cuando el entonces presidente regional y hoy alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, inauguró la ampliación de la línea 8, que desde ese día une Nuevos Ministerios y Barajas en 12 minutos. Pero el metro sólo llega hasta la actual terminal del aeropuerto (en realidad, tres terminales en un mismo edificio), a pesar de que en 2002 ya se sabía que Barajas iba a crecer con una terminal nueva. Esa segunda terminal, aún en construcción, está previsto que sea inaugurada en 2006.

Ahora, según se acerca la fecha de apertura del Gran Barajas, se hace evidente la necesidad de construir una estación de metro más que llegue hasta allí. El Gobierno regional, dirigido por Esperanza Aguirre, siempre ha sostenido que esa obra tiene que pagarla el Ejecutivo central porque dará servicio a una infraestructura, el aeropuerto, que es responsabilidad del Estado y beneficia a todos los españoles.

Fomento replica que construir metro, y pagarlo, es competencia exclusiva de las comunidades autónomas. La ministra Magdalena Álvarez recordó el pasado noviembre que no sólo Ruiz-Gallardón se había comprometido a seguir ampliando la línea 8 hasta la nueva terminal, sino que los presupuestos de Aguirre para 2004 reservaban ya una partida para esa obra.

"No entiendo cómo en un presupuesto de 4.000 millones no encuentran 75 millones, que es lo que cuesta prolongar el metro a la terminal", protestó Álvarez, después de reunirse con Francisco Granados, entonces consejero de Transportes, para intentar llegar a un acuerdo que no se produjo. Ayer, una portavoz del ministerio insistió en que "Fomento nunca ha financiado un metro y nunca lo financiará". Expertos consultados por este diario rebajan a menos de 20 millones el coste para ampliar la línea 8.

La actual consejera de Transportes, María Dolores de Cospedal, afirmó ayer que le parece bien el proyecto de línea de cercanías del ministerio. "Nosotros mismos pedimos que se hiciera, porque eso permitirá llegar desde el aeropuerto hasta Chamartín y Atocha y enlazar aquí con el AVE", argumentó. Pero reiteró: "Lo más urgente, lo prioritario, no es eso, sino ampliar el metro hasta la nueva terminal".

"Sólo si dan los Juegos"

"Es un disparate tirar a la basura el dinero invertido en la macroes-tación de Nuevos Ministerios [desde la que se pueden facturar los equipajes y llegar al aero-puerto]", dijo De Cospedal, que es partidaria de sentarse "a hablar" con la ministra. La consejera reiteró que la Comunidad no piensa hacerse cargo de la prolongación del metro a la nueva terminal porque "el aeropuerto es de competencia estatal". Pero dejó una puerta abierta: "Sólo financiaremos esta obra si a Madrid le dan los Juegos Olímpicos".

Fomento emitió un comunicado en el que afirma que, cuando la línea de cercanías esté construida, se podrá llegar en siete minutos desde la nueva terminal de Barajas a Chamartín, y en 11 minutos a Nuevos Ministerios. Eso no ocurrirá antes de siete años: "Lo que es seguro es que, si Madrid es elegida sede de los Juegos, la obra estará terminada en 2012", señaló la portavoz del ministerio. Para el caso contrario no se atrevió a dar un plazo. "Estas infraestructuras son muy complejas", subrayó. "Ahora se inicia el periodo de información pública durante un mes, se estudiarán las alegaciones, se someterá a una declaración de impacto ambiental, y después se hará el proyecto constructivo. Más tarde hay que adjudicar las obras y hacerlas. Y la construcción de una línea férrea es muy complicada".

El nuevo acceso ferroviario permitirá que "una parte de los trenes de cercanías que provienen de la estación de Atocha, tanto a través del actual túnel como del nuevo que pasará por Sol-Gran Vía [el segundo túnel de la risa, en construcción], tenga continuidad hasta el Nuevo Área Terminal del aeropuerto", explica la nota de Fomento.

El primer tramo de cuatro kilómetros de la nueva línea, entre Chamartín y el cruce con la M-40, irá en paralelo a una línea férrea ya existente que tiene una estación en Hortaleza. Esa estación será remodelada para facilitar "el acceso cadenciado hacia Chamartín de las circulaciones de cercanías del aeropuerto y la penetración directa del corredor del Henares por O'Donnell".

Después, entre la M-40 y Barajas, todo el trazado de la nueva línea (otros cuatro kilómetros) discurrirá en túnel bajo el futuro barrio de Valdebebas. Allí se abrirá otra estación que dará servicio "al Parque Valdebebas, a los desarrollos residenciales, a la Ciudad Deportiva del Real Madrid, a la ampliación de los recintos feriales y a la nueva Ciudad de la Justicia". Toda la obra tiene un presupuesto inicial de 196,7 millones.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_