La ONU cifra en 180.000 los muertos en el conflicto de Darfur

Más de 180.000 personas -una media de 10.000 al mes- han muerto en la región sudanesa de Darfur durante el último año y medio. Las causas son fundamentalmente dos y están interligadas: la acción de las milicias Janjawid vinculadas al régimen de Jartum y la creciente crisis alimentaria que se vive en la zona como consecuencia del conflicto armado, informó ayer Jan Egeland, secretario general adjunto de Naciones Unidas para asuntos humanitarios.

La ONU barajaba hasta ahora una cifra en torno a las 70.000 víctimas mortales. Pero ahora, ésta se eleva notablemente. "Nos encontramos", dijo Egeland, "en una situación de gran emergencia". El responsable de la asistencia humanitaria del organización internacional señaló además que estas muertes "podrían haberse evitado".

El último informe de Naciones Unidas sobre el conflicto en Darfur, presentado la semana pasada ante el Consejo de Seguridad para su examen, acusa directamente a las autoridades de Jartum y las fuerzas rebeldes en la región sudanesa de faltar a sus compromisos para hallar una solución política a la crisis. Para la ONU, ninguna de las partes ha logrado "capitalizar" el clima positivo que empezó a respirarse en enero de 2005, cuando se firmó el acuerdo de paz.

El secretario general de la ONU, Kofi Annan, pidió el viernes un esfuerzo mayor para poner fin al conflicto, pero las fuerzas rebeldes están divididas y obstaculizan la labor humanitaria. Annan denunció que las milicias Janjawid siguen atacando los campamentos civiles y acusa a Jartum de no actuar con decisión para poner fin a la continua violación de los derechos humanos.

El viernes expira el mandato de la Misión Avanzada de Naciones Unidas en Sudán (UNAMIS), que fue prorrogado el jueves por una semana para que los miembros del Consejo de Seguridad pudieran discutir los detalles para el despliegue de una verdadera fuerza de pacificación. Annan propuso un contingente de al menos 10.000 militares. El coste del operativo se estima en más de 1.000 millones de dólares para el primer año. En la actualidad hay presentes 1.900 observadores de la Unión Africana.