La oferta hotelera ha crecido nueve puntos más que la demanda en los últimos cinco años

Aunque la actividad turística en Andalucía mantiene unas aceptables tasas de crecimiento en los últimos años -2,8% en 2004-, el negocio hotelero presenta cada vez márgenes mas estrechos y está sometido a una fuerte competencia. La proliferación de nuevas plazas no se corresponde con el aumento de la demanda. Desde 1999, la oferta de camas ha crecido un 27%, mientras que las estancias hoteleras lo han hecho en una proporción mucho menor, 16%.

El boom que experimentó la actividad turística desde el año 1994, con tasas de crecimiento anuales de dos dígitos de forma constante hasta el año 2000, provocó una fuerte oleada de inversiones en nueva planta hotelera y en el sector inmobiliario sin parangón que no ha tenido freno en los últimos años, cuando la demanda ralentizó su crecimiento. Desde el año 2000, la ocupación media de las plazas hoteleras -50,4% en 2004- acumula un descenso de seis puntos, con la consiguiente pérdida de rentabilidad económica de las empresas hoteleras, si bien no hay un comportamiento homogéneo, y hay grandes diferencias según categorías y zonas.

A lo largo del año pasado se abrieron en la comunidad autónoma 95 establecimientos hoteleros con 15.595 nuevas plazas, un 9,3% más que las censadas en 2003. Las pernoctaciones de nuevo aumentaron a un ritmo menor, un 5,7% y sumaron un total de 38.847.649.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en diciembre de 2004 había abiertas en Andalucía 182.558 plazas hoteleras, un 27% más que a finales de 1999. En ese tiempo, las pernoctaciones crecieron un 16%.

Rentabilidad

En un símil muy empleado en estadística puede decirse que la tarta turística crece, pero los comensales aumentan más y las raciones en consecuencia tienen que ser menores. En 1999, cada plaza hotelera registraba al año una media de 233,6 estancias. Ahora, esta proporción es de 212,7.

Según datos de la Central de Balances de Andalucía, la rentabilidad económica media de los hoteles fue en 2002, último ejercicio con información disponible, del 6,74%, una diferencia de 2,20 puntos menos que en el año 2000.

El desajuste entre la evolución de la oferta y la demanda es especialmente notorio en la Costa del Sol, con una situación de clara sobreoferta. La provincia de Málaga fue la única donde el año pasado descendieron las pernoctaciones hoteleras, (-4,1%). El presidente del Patronato de Turismo, Juan Fraile, ha advertido recientemente que el actual ritmo de crecimiento de la oferta de alojamiento en la Costa del Sol "es insostenible para cualquier destino".

En el extremo contrario, Huelva es la provincia donde más crecieron en 2004 las pernoctaciones hoteleras (35,4%) y la oferta de plazas (43,7%), con la puesta en servicio de más de 5.000 nuevas camas. En Cádiz, segunda provincia en crecimiento de las estancias (16,5%), las plazas aumentaron por debajo de esta proporción, 7,7%. Por el contrario, el desajuste es llamativo en Almería, con un aumento de las estancias del 13% correspondido con un incremento de las plazas del 31%.

El 71% de las pernoctaciones en hoteles andaluces se localiza en la costa y más de la mitad, 19,8 millones, en hoteles de cuatro y cinco estrellas, con grados de ocupación mucho más elevados que el resto.