El Ayuntamiento se encargará de derribar el edificio
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, anunció ayer que será el Ayuntamiento el encargado de derribar la torre Windsor. El Consistorio aplicará la llamada acción sustitutoria, por la que acometerá el desmontaje del edificio y luego pasará la factura a los propietarios del inmueble.
Ruiz-Gallardón explicó que el incendio quedó técnicamente extinguido a la una de la madrugada de ayer. Los bomberos tendrán que esperar 48 horas para poder entrar en el mismo y comprobar el estado en que ha quedado la estructura. Eso supone que, como muy pronto, el acceso está prohibido hasta la una de la madrugada de mañana, miércoles. También tendrán que emitir un informe los técnicos del Departamento de Control de la Edificación. "Serán los encargados de ver el grado de resistencia y de riesgo que hay en el inmueble. La demolición del edificio es irreversible", señaló el alcalde.
Los informes de los bomberos y de los técnicos deberán recoger qué sistemas son los más adecuados para desmontar la torre. El método elegido deberá garantizar la seguridad de los operarios y de los usuarios de los edificios colindantes. "Como está en una situación compleja, será el Ayuntamiento el que procederá a la demolición. Lo hará con cargo a la propiedad", añadió Ruiz-Gallardón.
El regidor madrileño explicó que había pasado el riesgo de que el edificio se derrumbara por la acción del fuego. Sin embargo, aún queda la posibilidad de que el inmueble se colapse por las altas temperaturas (de hasta 1.000 grados) alcanzadas en el siniestro. Los bomberos permanecerán junto a la torre por si se reaviva el fuego. Además, controlarán el enfriamiento de la estructura con cámaras térmicas. "Éstas ya nos están indicando que van bajando de forma muy considerable los grados que se alcanzaron durante el incendio", comentó Ruiz-Gallardón. "El edificio está respondiendo en condiciones óptimas", añadió.
El primer edil se reunió con consejeros de la Comunidad de Madrid, con concejales de su Ayuntamiento y responsables de seguridad y transportes.
El grupo municipal socialista del Ayuntamiento de Madrid informó ayer de que un vehículo de bomberos con brazo articulado que puede proyectar agua hasta una altura de 80 metros estaba averiado y no pudo utilizarse en el incendio de la torre Windsor. El Consistorio, que confirmó este hecho, cree que su uso no hubiera evitado el desastre, informa la agencia Efe.
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