Los futuros agentes municipales deberán tener el bachillerato o un título superior

La futura Ley de Coordinación de las Policías Locales introduce cambios en estos cuerpos. Entre ellos, que los futuros aspirantes deberán de tener como mínimo el bachillerato para poder acceder a las pruebas de selección. Hasta ahora bastaba con disponer del graduado escolar para poder opositar a estos cuerpos. También se elimina la antigüedad de dos años en el carné de motocicleta. El texto, que ha sido entregado a los sindicatos y a la oposición para que lo estudie y se llegue a un consenso, deberá de pasar por la Asamblea para que reciba el visto bueno y entre en vigor.

El borrador ha sido redactado por la Consejería de Justicia e Interior, que dirige el vicepresidente segundo, Alfredo Prada Presa. El nuevo texto sustituirá al que está vigente, que fue aprobado en 1992. Antes de pasar por la Asamblea, deberá ser consensuado con todas las fuerzas políticas y con los sindicatos del cuerpo. En la Comunidad hay unos 13.000 policías locales, distribuidos de forma muy diferente. La plantilla más grande es la de la capital, con más de 6.000 agentes. El borrador recoge importantes cambios en la forma de acceso y promoción, además de algunas actualizaciones.

Hasta ahora, para acceder era necesario que los aspirantes tuvieran una edad de 21 años. Ahora se rebaja hasta los 18, que coinicide con la mayoría de edad. Otra novedad consiste en los años hasta los que se podrá opositar para ser agente local. Si en la actualidad era hasta los 30 años, con la entrada en vigor del nuevo texto el límite quedará fijado en 35 años. Ello supone un claro contraste con otros agentes de la autoridad, ya que la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía tienen como edad límite los 30 años.

48 años en la ejecutiva

En el caso de la escala ejecutiva -la superior, que incluye oficiales, subinspector e inspector-, los opositores tendrán de plazo hasta los 48 años en lugar de los 45 vigentes. En este caso deberán demostrar, como hasta la fecha, que disponen de un título universitario de grado medio, superior o doctorado.

Otra novedad de las convocatorias de plazas es que hasta ahora los policías tenían que disponer del graduado escolar o un título equivalente. El borrador recoge, sin embargo, que suben las exigencias en la formación, de tal manera que los opositores deberán demostrar que están en posesión, como mínimo, del bachiller superior o una titulación equivalente o superior.

El carné de motocicletas era un requisito imprescindible, pero además con un condicionante: el titular debía de tenerlo con una antigüedad mínima de dos años. Esta última circunstancia queda anulada.

En la convocatoria de nuevas plazas también se elimina una antigua cláusula que ya dio lugar a protestas y a acusaciones de agravios comparativos. Antes, todas las oposiciones de nuevos agentes incluían que los futuros policías varones deberían haber cumplido el servicio militar obligatorio o la prestación civil sustitutoria. Ahora se actualiza la norma y se recuerda que esta disposición fue derogada por un real decreto de 2001.

El nuevo texto recoge qué pruebas deberán desempeñar las mujeres embarazadas que quieran entrar en las policías municipales. Hasta ahora, este supuesto no quedaba contemplado en ninguna parte del articulado de la ley de 1992.

La consejería plantea además un cambio de categoría laboral de los agentes. Hasta la fecha, los policías y cabos (las dos más bajas dentro del cuerpo) están dentro de la categoría D, y los sargentos, en la C. Con el próximo texto, los primeros ascenderán a la C, y los segundos, a la B. Esto podrá suponer aumento de sueldo o equiparación con otros funcionarios municipales.

Uno de los principales cambios que recoge el borrador son los cambios de denominación de los distintos puestos de la escala dentro del cuerpo. Hasta ahora, estaba formada por policías, cabos, sargentos, suboficiales, oficiales, subinspectores e inspectores. Con la nueva denominación, se abandona parte de la terminología militar y se asimila más a los puestos del Cuerpo Nacional de Policía, aunque con algunas variantes y nombres más complicados y repetitivos.

La nueva escala quedará, salvo cambios ulteriores, de la siguiente forma: agente, oficial, subinspector, inspector (antiguo suboficial), intendente, intendente mayor e intendente principal (actual inspector). Lo que de momento no recoge el actual borrador es si existe una denominación específica para el cargo de inspector jefe que tienen algunas policías municipales, como la de la capital.

Estos cambios deberán ser puestos en común con los representantes sindicales y los portavoces de PSOE, IU y PP en la Asamblea de Madrid. La tramitación legislativa podría comenzar en breve, de forma que estuviera vigente en pocos meses. Estas normas no cambiarán, en principio, las oposiciones que vayan a ser convocadas en breve.