La insurgencia iraquí mata a un alto funcionario y a un periodista de la televisión árabe financiada por EE UU

Un periodista iraquí de la cadena árabe Al Hurra, financiada por Estados Unidos y que tiene su sede en Virginia, fue asesinado ayer cerca de su domicilio de Basora, la principal ciudad del sur de Irak, junto a su hijo de ocho años. En Bagdad fue asesinado un alto funcionario del Ministerio de Cultura cuando fue tiroteado el coche en el que viajaba. También en la capital iraquí, fue secuestrado otro alto funcionario del Ministerio del Interior.

Dentro de la ofensiva de la insurgencia, que ha recrudecido sus ataques en los últimos días, se produjo un intenso tiroteo en la calle Haifa, uno de los bastiones de la resistencia en la capital iraquí, después de que fuesen asesinados en una emboscada tres miembros del Partido Democrático del Kurdistán. El tiroteo entre los insurgentes y los soldados de EE UU se prolongó durante varias horas. Un soldado estadounidense murió en un emboscada al norte de la ciudad.

Abdel Husein Khazaal, el periodista asesinado en Basora, trabajaba además de en Al Hurra en el servicio de prensa del Gobernador y era miembro del partido religioso chií Dawa, que forma parte de la gran coalición, apoyada por el ayatolá Alí al Sistani, que las encuestas y los primeros datos dan como vencedora de los comicios del 30 de enero.

Sin embargo, la Comisión Electoral iraquí anunció ayer un retraso en la publicación de los resultados definitivos de los comicios, que en principio estaba prevista para hoy. Farid Ayar, portavoz de la Comisión que actúa de forma independiente, señaló, sin dar una fecha precisa, que los resultados serán difundidos "lo antes posible". El motivo del retraso, según explicó Ayar, será el nuevo recuento de 300 urnas. "Lo importante es que estamos al final del proceso. Estamos realizando unas comprobaciones finales y estaremos en disposición de anunciar los resultados en breve", aseguró.