Los socialistas acusan al PP de "dinamitar" el proceso de regularización de inmigrantes

El PP, única organización política contraria a la regularización de inmigrantes que el Gobierno inició el lunes, lanzó ayer una ofensiva durísima contra el proceso. El presidente del partido, Mariano Rajoy, acusó al Ejecutivo de contradecir la política de la UE; el secretario general, Ángel Acebes, lo responsabilizó de animar a los traficantes de personas, y el portavoz parlamentario, Eduardo Zaplana, profetizó que al final del proceso habrá más sin papeles que antes. El portavoz de inmigración del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, denunció que el PP "intenta dinamitar la regularización".

El triple ataque de los dirigentes del PP forma parte de una serie que ha llevado a los populares a convocar, en la última semana, al menos una conferencia de prensa diaria para atacar la regularización de los inmigrantes que estén empadronados en España desde antes del 7 de agosto del año pasado, carezcan de antecedentes penales y dispongan de un contrato de trabajo de seis meses.

Rajoy lanzó su mensaje desde Valencia, donde pronunció un mitin sobre la Constitución europea: "Que el Gobierno no cuente con nosotros para una política de inmigración que es la contraria de la que se está haciendo en Europa, de la que pactamos los países de la UE para después de la desaparición de fronteras. Cuando termine este proceso de regularización habrá más inmigrantes irregulares que antes", informa Pilar Marcos.

Esa última idea fue reforzada desde Madrid por el portavoz parlamentario del PP, Eduardo Zaplana, quien definió el proceso como "extraordinario y masivo", calificativos que Rajoy también había apuntado, aunque de manera más sutil.

Pero el más contundente del triunvirato popular fue Ángel Acebes. El último ministro del Interior del PP afirmó: "Si el mensaje es que en España se pueden conseguir papeles y puede haber procesos de regularización masiva, quienes los promueven son quienes están dando la razón a las mafias que trafican con seres humanos".

A Acebes le respondió el portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien consideró "una desfachatez" que Acebes descalifique un proceso que ha sido puesto en marcha por el Gobierno precisamente para arreglar "la chapuza" que él generó en su etapa en Interior.