Chaves aborda con Castro una posible visita del Rey a Cuba, y La Moncloa precisa que no está prevista

El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, se entrevistó el sábado con Fidel Castro y con varios representantes de la disidencia cubana, convirtiéndose en el primer político europeo que pone en práctica la nueva estrategia de dialogo crítico con las autoridades de La Habana, promovida a iniciativa del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Chaves y el mandatario cubano hablaron sobre un posible viaje del rey Juan Carlos a la isla en 2006. Fuentes de La Moncloa descartaron horas después este viaje.

La visita de Chaves a Cuba, de poco más de 48 horas, excedió desde el principio los estrechos límites del viaje de un presidente autonómico. Chaves llegó a la isla el jueves, tan sólo tres días después de la decisión de la UE de suspender "temporalmente" las sanciones impuestas a Cuba en 2003, que fue recibida fríamente por La Habana, por lo que el viaje era considerado un termómetro para medir la salud de las relaciones entre Cuba, Madrid y Bruselas.

La delegación andaluza llegó a pensar que debido al encuentro programado con los disidentes, la reunión con Castro no se celebraría. No fue así. El sábado por la tarde recibió al presidente andaluz durante hora y media.

Según Chaves, lo que más molestó a La Habana fue la necesidad de reevaluar en julio el levantamiento de las sanciones de la UE. Sin embargo, el presidente andaluz no encontró en Castro una posición de cerrazón "hermética", y éste le expresó su agradecimiento por el papel desempeñado por España en el giro de la política europea.

El presidente de la Junta sorprendió al confirmar que habló con el líder cubano sobre un posible viaje de los Reyes a Cuba, único país latinoamericano que don Juan Carlos y doña Sofía no han visitado nunca oficialmente -estuvieron en la isla 1999, pero en el marco de la IX Cumbre de Presidentes Iberoamericanos de La Habana-. Chaves dijo que en marzo, cuando se encuentren en Madrid el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, y su homólogo cubano, podrían concretarse los términos y las fechas del viaje. Tanto el Gobierno como La Zarzuela señalaron ayer que no hay ningún viaje a Cuba previsto en 2005 ni en 2006. Chaves también transmitió a Castro la invitación de Zapatero y del Rey para que participe en la próxima cumbre presidencial de Salamanca, a fines de este año. Sobre su asistencia, el mandatario bromeo: "Según se ponga el sol".

Una hora después, Chaves se entrevistó durante poco más de media hora con cinco disidentes cubanos, representantes de varias tendencias, en la Embajada de España. Chaves expresó a los opositores que la nueva estrategia promovida por el Gobierno español de retomar el diálogo con las autoridades no supone un abandono de la disidencia, la cual, opinó después, está "muy dividida". Algunos opositores le entregaron una lista de prisioneros enfermos para que se interesase por su liberación.