Bush transmite al Rey la posibilidad de tener un encuentro con Zapatero en Bruselas

La Casa Blanca no descarta que el presidente George W. Bush mantenga una conversación con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en la visita que tiene previsto realizar a Bruselas dentro de tres semanas, según fuentes de la Administración norteamericana. Así se lo transmitió Bush al monarca en la conversación telefónica que ambos mantuvieron el miércoles. Las relaciones entre Washington y Madrid atraviesan un notable periodo de frialdad, y España no está entre los ocho países europeos que la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, visitará la próxima semana.

El pasado miércoles, don Juan Carlos llamó por teléfono a George W. Bush para felicitarle por su reciente toma de posesión. Durante la conversación, "el presidente expresó su agradecimiento por la contribución española en Afganistán y le dijo al Rey que estaba deseando trabajar con el Gobierno español", según dijeron a EL PAÍS las mencionadas fuentes de la Administración de EE UU. Éstas añadieron que también se evocó el lugar y la fecha en que esa voluntad estadounidense podría cristalizar: el próximo 22 de febrero, en la visita que Bush tiene previsto hacer a la OTAN y a las instituciones comunitarias en Bruselas.

"Existe la posibilidad de que el presidente vea a Zapatero en Bruselas. Quizás eso va a ponernos en el camino de mejorar nuestras relaciones", explicó un alto funcionario del Gobierno de EE UU. Que esas relaciones han conocido mejores momentos lo demuestra el hecho de que Bush nunca respondió personalmente a la llamada de felicitación que el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, le hizo al día siguiente de ganar las elecciones.

La Administración estadounidense no ha olvidado la rápida retirada de las tropas españolas en Irak, al día siguiente de que el presidente del Gobierno español asumiera su cargo después de ganar las elecciones de marzo de 2004.

Durante el año pasado hubo otros episodios de desencuentro, y el entonces embajador de EE UU en Madrid, George Argyros, no asistió a los actos de la fiesta nacional del 12 de octubre.

Para zanjar la crisis, don Juan Carlos fue invitado por el presidente Bush a su rancho de Crawford (Texas) el pasado 24 de noviembre. En el almuerzo, al que también asistió el ex presidente George H. W. Bush, el Rey escuchó al presidente norteamericano que su voluntad de enderezar las relaciones se había visto obstaculizada por decisiones y declaraciones del Gobierno español que no consideraba amistosas, y que él estaba "dispuesto a llevarse bien" pero "a la espera de gestos".