"Creo que tenía una obligación con mi partido"
Antonio Moreno (San Fernando, 51 años) dejará mañana de ser alcalde después de casi 16 años gobernando este municipio gaditano de 93.000 habitantes. Se marcha por sorpresa tras apoyar la candidatura derrotada de Antonio Ortega en el último congreso del PA.
Pregunta. ¿Por qué deja la alcaldía?
Respuesta. Tenía claro que era mi último mandato y creo que tenía una obligación con mi partido para que el compañero que me sustituyera (Manuel María de Bernardo) tuviera el tiempo suficiente como para ser conocido y valorado adecuadamente en las elecciones de 2007.
P. ¿Ha sido una imposición del PA o un acto de generosidad por su parte?
R. En España no hay cultura de que la gente se va porque toma realmente una decisión. En este caso, he sido fiel a una reflexión libre y meditada. No hay imposición de nadie sino un compromiso leal con mis compañeros.
P. ¿Cómo le gustaría ser recordado?
R. Con el cariño que me han demostrado estos días. Como una persona buena que me he dedicado a trabajar y pelear por mi pueblo.
P. ¿Qué espinita se lleva clavada?
R. Ninguna, pero me hubiese gustado acabar algunos proyectos que están encima de la mesa, como la desafectación de los terrenos militares o ver finalizada la Ronda del Estero.
P. ¿De qué se siente más orgulloso?
R. De que durante cuatro mandatos los ciudadanos de San Fernando me hayan apoyado mayoritariamente. Eso no tiene precio y no se borrará nunca de mi mente.
P. ¿No le hubiese gustado ser el alcalde en el bicentenario de Las Cortes?
R. Claro que sí. He iniciado un proceso de memoria histórica para que el 24 de septiembre de 1810 fuera mucho más que una calle.
P. ¿Qué San Fernando encontró y cuál deja?
R. Hay muchos ejemplos de modernidad desde 1989.
P. ¿Se quitó la corbata con el conflicto de Izar?
R. Merecía quitarse la corbata y hubiese emulado a Full Monty si fuera necesario porque esta ciudad no se merecía que se cerrara su factoría naval.
P. ¿Dicen PSOE y PP que se marcha porque su proyecto estaba agotado?
R. Es normal que digan eso después de no tocar bola durante 16 años y haber tenido muchos contrincantes que se han quedado en la cuneta. Cuando se inauguren la Ronda del Estero, los puertos deportivos y el Centro de Interpretación Histórica no sé qué dirán.
P. ¿Qué consejo le ha dado a Manuel María de Bernardo?
R. Que escuche a todo el mundo, pero que sepa discernir entre quien le dice toda la verdad y quien sólo defiende sus intereses particulares.
P. ¿Le han fallado sus quinielas políticas en el último año?
R. No, porque ni siquiera Julián Álvarez se esperaba ese resultado.
P. ¿No le sorprendió la derrota de Antonio Ortega?
R. No, en absoluto. Y se lo comuniqué a Antonio la noche previa, pero le debía lealtad y le voté. Ahora le debo lealtad a Julián Álvarez, como he hecho con todos los secretarios generales.
P. ¿Soñaba con ser consejero?
R. He soñado con ser presidente de la Junta, pero no con ser consejero.
P. Y, ¿sigue soñando?
R. Si, totalmente, pero soy consciente de la realidad de mi partido y de Andalucía.
P. ¿Será candidato?
R. No, hay mucha gente por ahí para ese puesto.
P. Sin Rojas Marcos, Pacheco y Ortega, ¿adónde debe caminar el PA?
R. Al encuentro consigo mismo y con el pueblo andaluz para demostrarle lo que decía Blas Infante en el himno: para volver a ser lo que fuimos. Este partido tuvo cinco diputados en Madrid y fue una alternativa auténtica, pero por el protagonismo de estas personas que sólo se miraron el ombligo, quitando Ortega que heredó una etapa muy ingrata, el partido está así.
P. ¿Es Julián Álvarez el hombre adecuado?
R. No lo sé, porque apenas lleva un mes como secretario general, pero creo que tiene en sus manos la posibilidad de hacerlo. Tiene todo el camino despejado porque ya no están ni Pacheco ni Rojas Marcos.
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