El Ayuntamiento moroso

La deuda del Ayuntamiento de Huelva, gobernado por el Partido Popular (PP), parecía hasta ahora algo abstracto, un argumento más de la disputa política, pero de pronto ha emergido a la superficie, se ha plasmado en hechos concretos. Telefónica cortó por impago, entre el siete y el 13 de enero, un total de 48 líneas de teléfono de organismos municipales, como centros sociales, bibliotecas y mercado de abastos. Y los 49 monitores de las 52 escuelas deportivas municipales denunciaron la pasada semana que no cobran desde septiembre su asignación mensual, 167 euros -alguno ha recibido en los últimos días parte de los atrasos-.

Los partidos políticos de la oposición (PSOE e IU) llevan años advirtiendo sobre la caótica situación de las arcas del Ayuntamiento, pero en vista de las circunstancias han tenido que dar un paso adelante y ahora reclaman un plan de emergencia económica. Los socialistas incluso han expresado su disposición a colaborar con el alcalde, Pedro Rodríguez, para que los proveedores cobren los atrasos lo antes posible. El PSOE maneja datos para la preocupación: el Ayuntamiento adeuda 115 millones de euros a los proveedores y otros 150 millones a los bancos. Los impagos han provocado que cien empresas de la ciudad estén a punto de cerrar: unos 500 trabajadores irían al paro. La caja del Ayuntamiento está vacía.

Lo socialistas han realizado una llamada a la austeridad. "Los números rojos han crecido absurdamente porque el equipo de gobierno desarrolla una política cara, Pedro Rodríguez es un alcalde caro, excesivamente aficionado a las fiestas y al derroche. Nosotros apostamos por la mejora de los servicios públicos, por gastar únicamente lo que se pueda", afirmó ayer el portavoz del PSOE, José Juan Díaz Trillo.

El equipo de gobierno ha reaccionado al diluvio de críticas a través del contraataque. El concejal de Hacienda, Saúl Fernández Beviá, anunció semanas atrás la creación de un registro para agilizar los pagos. "Este Ayuntamiento cuenta con un plan de tesorería que, para cumplirse, depende en gran medida de los ingresos que por ley recibimos del Gobierno central, de la Junta y de la Diputación, organismos gobernados por el PSOE, que pagan mal y tarde", indicó Fernández Beviá. En esta idea abundó el portavoz del PP, Francisco Moro, que además acusó a los socialistas de estar creando una falsa alarma entre los ciudadanos para lograr un rédito político. "El PSOE miente, actúan con irresponsabilidad y practican una política dañina para Huelva. La deuda del Ayuntamiento sólo ha aumentado en un 2% en relación a la que tenía esta institución después de los 16 años de gobierno socialista. Huelva, con Rodríguez está en marcha, y con el PSOE estaba paralizada", dijo Moro.

El secretario de Organización del PSOE de Huelva, Mario Jiménez, observa el panorama con preocupación. "Huelva se ha convertido, por obra y gracia de Pedro Rodríguez, en la ciudad del desempleo, de la delincuencia juvenil y del despilfarro. Ha llegado el momento de que se imponga el sentido común", afirmó. Por su parte, José María Benabat, concejal socialista, puso el énfasis en los impagos a los monitores deportivos: "Los niños, de entre 8 y 11 años, pueden quedarse sin sus monitores. Otra triste frivolidad", dijo.

El portavoz de IU, Manuel Rodríguez, subrayó un dato: El Centro Económico y Social (CES) denunció en su día que el 30% de los ingresos presupuestados por el equipo de gobierno no existe, son ficticios: La deuda, por tanto, crecerá aún más en 2005. "Tal vez resulte finalmente necesario e inevitable vender suelo para pagar a los pequeños y medianos empresarios de Huelva", indicó Manuel Rodríguez.