Homenaje a un cineasta personal

El Festival Internacional de Cine Gay de Bilbao, Zinegoak, entregó ayer en el Teatro Arriaga, durante su gala de apertura, su premio honorífico al cineasta Ventura Pons (Barcelona, 1945), quien también acaba de ver cómo su último filme, Amor idiota, ha sido seleccionado para la sección Panorama del próximo Festival de Berlín. Zinegoak realizará en su próxima edición una retrospectiva de este realizador, guionista y productor.

Pons se encontraba contento y lo demostró. Aterrizó en un Bilbao sombrío e invernal, ciudad que, reconoció, no había visitado nunca. Vestido en tonos apagados, abandonó pronto su apariencia tímida para lanzarse a hablar por los codos. "He estado presentando películas en medio mundo y nunca he estado en Bilbao; quizá por eso mi cine es poco conocido aquí", aventuró el realizador de filmes como Caricias, Amigo / Amado, Actrices o Anita no pierde el tren. Su filmografía abarca una veintena de títulos, unos de temática gay y otros no. "Yo no me defino como un director de tematica gay; a mí me interesan muchas cosas. El cine es la libertad de cada uno", apuntó.

"Las carencias en la afectividad son las mismas en gays y heterosexuales"

Lo que más le ha interesado a Pons ha sido bucear en las relaciones humanas, "lo que atañe a todos los seres humanos, independientemente de su condición sexual". "Las carencias humanas en la afectividad son iguales en homosexuales y heterosexuales. Lo que importa es el sentido de las cosas, no el objeto de las cosas", sentenció. Su última película, Amor idiota, protagonizada por Cayetana Guillén Cuervo y Santi Millán, habla del "ansia del otro, la necesidad del otro", un tema que "se entiende en todo el mundo y por todas las personas", comentó Pons, quien sin embargo sí ha reconocido públicamente su orientación homosexual. Este filme se estrenará en España el 11 de febrero.

Aunque ha acudido a muchos festivales gays, afirma que "en la actualidad está todo muy mezclado". "En Berlín, aparte del Oso de Oro, se entrega el Teddy Bear de peluche para películas de temática gay, y en Londres la misma gente que hace el festival de cine hace el festival gay, por lo que las intenciones son comunes y se complementan", apuntó. Precisamente, un día antes, el director de Zinegoak, Roberto Castón, comentaba su deseo de contactar con los organizadores del Festival de Cine de San Sebastián para realizar actividades en común.

Pons demostró sentirse en un buen momento, el buen momento al que puede llegar un director de cine y teatro que ha hecho una apuesta decidida por un trabajo personal, lejos de los circuitos comerciales. Para garantizar su libertad a la hora de enfrentarse a un filme, creó en 1985 su propia productora, Els Films de la Rambla. "Si en España se hicieron el año pasado 130 películas y las que realmente funcionan son cinco o seis, no entiendo por qué la gente no hace una apuesta más personal y se arriesga", dice el hombre que declara en su página web (www.venturapons.com) que considera el cine "como una droga dura".