Xavier Montanyà narra en un libro el secuestro del transatlántico 'Santa María'

La mañana del 22 de enero de 1961 los pasajeros del transatlántico portugués Santa María oyeron un extraño mensaje por los altavoces. Un tal capitán Galvão les anunciaba que el barco había sido secuestrado por el Directorio Revolucionario Ibérico de Liberación (DRIL). El periodista Xavier Montanyà (Barcelona, 1961) recorre en Pirates de la llibertat (Empúries) la peripecia de aquellos revolucionarios. La acción del DRIL, que agrupaba a antifascistas españoles y portugueses, tenía dos objetivos. El primero, llamar la atención de la prensa y denunciar así la vergonzosa pervivencia de las dictaduras de Franco y de Oliveira Salazar. El segundo, llegar a la costa africana y establecer allí un foco de resistencia armada.

"Aunque lo parezca, no se trataba de una utopía. Pretendían ocupar la isla guineana de Fernando Poo, que era por entonces una colonia española. El lugar lo vigilaba un destacamento militar muy pequeño", explica Montanyà. "Desde allí, tenían previsto trasladarse a otro país africano que les sirviera de base de operaciones. El contexto de la descolonización del continente les favorecía". Sin embargo, en el asalto al barco cayeron gravemente heridos algunos miembros de la tripulación, lo que provocó un cambio de planes ante la necesidad urgente de desembarcarlos. La vicisitud significaría el fracaso final de buena parte de la misión.

Montanyà, además de relatar el episodio del Santa María -el primer secuestro político de un barco-, condena en el libro los silencios de la transición. "La operación del DRIL era un intento de restaurar la democracia. Tenemos derecho a conocer la historia de las personas que lucharon contra la dictadura".