La industria textil suprimió casi 2.000 empleos el año pasado

Las empresas catalanas del sector textil, que desde el pasado 1 de enero hacen frente a un nuevo panorama de liberalización internacional que favorece a los grandes competidores asiáticos, vivieron el último año previo a esta prueba de fuego con un acelerado goteo de expedientes de regulación de empleo (ERE). En concreto, 2.743 trabajadores se vieron afectados por estos expedientes de enero a octubre, lo que supone un alza interanual del 14,7%. Y de esa cifra, 1.904 perdieron su empleo definitivamente, según los últimos datos de que dispone el Departamento de Trabajo e Industria.

Si bien el número de expedientes autorizados por la Generalitat no fue mucho mayor que el registrado en 2003 -año en que esta industria ya acusó la dura competencia de las importaciones asiáticas-, el número de trabajadores que han vivido en primera persona el problema sí avanzó de manera significativa. Al margen de los 1.904 trabajadores afectados por expedientes de extinción de empleo, 836 personas vieron suspendidos sus contratos temporalmente. El total de expedientes se mantuvo prácticamente estable, ya que pasaron de 63 a 67 de un año para otro.

En julio pasado, el Gobierno catalán suscribió un acuerdo con el Consejo Intertextil -la patronal del sector- y los sindicatos CC OO y UGT que permite a las empresas con una plantilla mínima fija del 80% suspender los contratos por un máximo de tres meses al año, a cambio de mejorar la formación de los trabajadores. La Generalitat presupuestó dos millones de euros para financiar la iniciativa en el segundo semestre del año.

Suspensiones temporales

El número de trabajadores afectados por esta práctica casi se duplicó en 2004, al pasar de 422 a 836. Pero el aumento de empleados afectados por la suspensión temporal de su contrato tiene poco que ver con las facilidades que dio el Gobierno catalán en julio. La mayoría de las empresas textiles "no han llamado a la puerta de la Generalitat para acogerse al acuerdo", aseguraron fuentes de Trabajo e Industria.

A los datos de 2004 habrá que sumar las cifras correspondientes a los últimos meses del año. Pero el balance no será mejor que el de 2003: el número de trabajadores del sector textil afectados por ERE entre enero y octubre de 2004 (2.793) ya supera la cifra correspondiente a la totalidad de 2003, con expedientes para 2.641 personas.

El Ministerio de Industria puso en marcha el pasado año un plan de ayudas públicas para hacer frente al previsible aluvión de importaciones asiáticas. Y tanto el ministro José Montilla como el Departamento de Industria han hecho un llamamiento a las empresas para que inicien procesos de deslocalización, con el objetivo de llevar a países de costes laborales bajos la producción de menor valor añadido.

Aun así, el goteo de cierres de empresas textiles es constante. Esta misma semana, Hilados Técnicos y Fibra Recubierta, con sede en Sant Llorenç d'Hortons (Alt Penedès), anunció el cese de su actividad, que afectará a 39 trabajadores. Cositex ha informado también del cierre de su fábrica en Fonollosa (Bages), con 28 despidos más.