Mas anuncia hoy públicamente su apoyo a la Constitución europea, un mes después de dar el 'sí' ante Moratinos
Era un secreto a voces. El líder de la oposición, Artur Mas, hará público por fin hoy su apoyo a la Constitución europea y recomendará a su partido, CDC, que vote a favor del tratado europeo. Esta declaración se produce después de que el pasado 10 de diciembre Mas diera el primer sí en Madrid al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, acompañado por el líder democristiano Josep Antoni Duran, quien siempre ha respaldado la Constitución europea.
Mas considera que el Gobierno español ha cumplido todas las condiciones marcadas por CDC, centradas en el reconocimiento institucional y lingüístico de Cataluña en los organismos comunitarios. El memorándum que presentó Moratinos el 13 de diciembre al Consejo Europeo para pedir el reconocimiento oficial del gallego, el euskera y el catalán satisface al líder de la oposición.
Mas, que reconoció ante Moratinos que siempre ha estado a favor del tratado constitucional, intentará ahora que su postura sea asumida por la ejecutiva de CDC antes del 15 de enero, fecha en que su partido celebrará un consejo nacional para fijar definitivamente su posición, a sólo un mes del referéndum, previsto para el 20 de febrero.
División interna
El debate en CDC sobre la Constitución europea revela una fractura interna. La plataforma Euroconvergents pel No, formada por militantes de Convergència contrarios al tratado europeo, recordó ayer a Mas que "aún no se cumple ninguna de las condiciones" que exigió el partido en su cónclave de octubre para respaldar la Constitución. El portavoz de la plataforma, Jordi Puigneró, afirmó que el reconocimiento lingüístico e institucional de Cataluña en la Unión Europea (UE) no se ha producido. "Otra cosa es que nuestro secretario general [Mas], por estrategia política o por lo que sea, diga que ya se cumplen las condiciones", espetó Puigneró.
Los euroescépticos de Convergència, además, creen que no han existido "avances" en la circunscripción electoral europea para Cataluña y en la garantía institucional de la unidad de la lengua catalana en el seno de la UE, entre otras exigencias.
