El grupo vizcaíno Akatz debuta después de 12 años entregados al 'reggae'
El caso del grupo vizcaíno Akatz es atípico, pues ha sobrevivido una docena de años sin publicar ni un disco de larga duración. Todo este tiempo ha permanecido, sin embargo, en boca de los aficionados vascos a la música jamaicana, como uno de sus más fiables valedores. Por ello ha titulado 12 años de éxitos ese estreno que publica Brixton Records.
Akatz ha invertido varias sesiones, entre la primavera de 2002 y este invierno, en grabar una colección que cuenta con el cadencioso ritmo del reggae como columna vertebral. Sobre ese colchón, ha incluido toques ska y detalles más groove en temas como Sugar O.T. y 555º Fahrenheit, y guiños al tema Shout! en Better days. Además, aplica el dinamismo del swing a Bi be bo bu ba, el sintético dub aflora en Promised land, y Jo deep arranca como una pieza gospel.
El repertorio incluye ocho canciones en inglés, dos en castellano, otro par en euskera y un tema instrumental, y en su grabación han participado 25 músicos, incluidos Freddie Reiter, saxofonista y flautista de New York Ska Jazz Ensemble, y la cantautora peruana Miryam Quiñones. No le ha faltado apoyo a una banda que se formó en Bakio en 1992, se instaló en Bilbao tres años después, y hasta ahora había publicado tres maquetas y un minicedé de siete canciones.
El sello vizcaíno Brixton Records también ha puesto en circulación Countryside: sounds from Nazario Street, que supone el estreno de Lone Ark, proyecto en solitario del cántabro Roberto Sánchez, ex Loud & Lone. Reggae y dub presiden el disco de un cantante y multiinstrumentista que también toca con Basque Dub Foundation, Super Ape y Ambassah.
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