Del distrito de Usera

Desde hace 38 años vivo en la colonia de Andalucía, barrio de San Fermín, ubicado en el distrito de Usera, por lo que creo tengo alguna idea de los problemas de la zona. Lejos de alabar todo lo que su periódico publica, me pareció acertado el enfoque que se hacía de este distrito en relación con la inmigración. Mi sorpresa ha sido mayúscula al leer la carta publicada en la sección de Opinión, en la que Elena Pavón, habitante de una zona concreta del distrito, muestra su descontento con el enfoque de la información y una gran satisfacción con los servicios públicos de la zona. Hace evidente su orientación política, llevándole a ver todo de color de rosa.

Sin entrar a valorar lo que es clase media y obrera -ella tiene claro que en este distrito pertenecemos a la primera-, sí que puedo dar fe de la carestía de la vivienda en la zona, aunque dudo que ésa fuese la razón que llevó a Ana Botella a no alquilar aquí la sede de la Concejalía de Servicios Sociales, ni siquiera que la población no necesitase de sus ayudas. Pero lo más insólito de su carta es que a esta señora le parece suficiente una única estación de metro para todo el distrito (eso sí, con dos salidas) y tres líneas de autobús (en la zona son unas cuantas más).

Si algunos de los habitantes de Usera usásemos esta estación, tendríamos que andar hasta nuestros hogares cerca de una hora. Esto es lo que esta señora entiende por ser uno de los barrios mejor comunicados. Siendo objetivos y ciñéndonos a los datos, si realizamos una comparación en área y población (esto es así desde hace demasiados años) con cualquier otro distrito de Madrid donde haya línea de metro (dejo que el lector elija el que quiera: Vallecas, Chamartín, Salamanca, Chamberí...) el número de estaciones es muy inferior (tanto en términos absolutos como si dividimos por habitante o metro cuadrado).

Usera es un distrito muy amplio y con muchas necesidades, entre ellas es preferente el establecimiento y consolidación de una red de transporte público de calidad y que llegue a todo él, no sólo a la calle de Marcelo Usera, que aunque le da nombre al barrio no era el referente del artículo. No valen las generalizaciones, pero es evidente que existe otra zona en este distrito, que la lectora obviamente desconoce, y que no es tan ideal como en la que ella vive, pero sí se veía reflejada en su reportaje y no en la carta de opinión (Pradolongo, Orcasur, San Fermín, La Perla...).

Para una vez que se ocupan en su periódico de las necesidades de los distritos del sur con un poco de conocimiento (les animo a que investiguen muchos otros problemas que existen en él) resulta que reciben un jarro de agua fría y les tratan de mentirosos y de falta de información. Era lo que me quedaba por ver.