Córdoba, Granada y Huelva apuestan por 'botellódromos'

La necesidad de hacer compatible la diversión nocturna con el descanso de los vecinos ha llevado a los ayuntamientos a desplegar toda su imaginación para buscar soluciones. Algunos han optado por acotar zonas, como en Córdoba, donde el gobierno municipal ha anunciado la creación de cuatro espacios, en los jardines de La Victoria, El Arenal, Chinales y el Jardín Botánico, en los que los jóvenes podrán consumir sus bebidas y tendrán a su alcance otras formas de ocio sin. Tendrían que haber entrado en funcionamiento este fin de semana pero se han retrasado para el siguiente porque, según el teniente de alcalde de Presidencia, "requiere una compleja coordinación entre varios colectivos y servicios municipales".

El Ayuntamiento de Granada también anunció a principios de año la construcción de un recinto vallado junto al nudo de la Circunvalación de Méndez Núñez, en las cercanías del Camino de Ronda. El consistorio previó la instalación de carpas para proteger de la lluvia y equipos eléctricos para programar conciertos y otras actividades. La bebida la servirían los dueños de los bares de copas para evitar el perjuicio que, según los empresarios, les produce el botellón que, combinado con el adelanto del horario de cierre, les deja poco tiempo para que la clientela consuma en sus locales. Pero los vecinos de la zona, que sufren desde hace años la movida, temen que, con la instalación, el botellón se quede para siempre y han conseguido paralizar el proyecto.

Zonas nocturnas

El Ayuntamiento de Huelva estudia incluir en el Plan General de Ordenación Urbana zonas destinadas al botellón. Una estará ubicada en un descampado de las inmediaciones del nuevo Estadio Colombino. "El PGOU debe tener en cuenta que en 500 metros no se pueden construir viviendas para evitar este tipo de incidentes", señala el edil de Medio Ambiente José Luis Gallardo.

El programa con el que el PSOE ganó las últimas elecciones municipales de Sevilla habla de la creación de cuatro espacios para el "esparcimiento nocturno" de los jóvenes, aunque el gobierno aún no tiene un proyecto claro. Por el momento, va a poner en marcha algunos centros que oferten actividades culturales por la noche, aunque la edil de Medio Ambiente, Cristina Vega (PSOE), está convencida de que la solución pasa por "hacer atractivas" zonas alejadas del casco urbano sin que los jóvenes sientan que se les está imponiendo.

En Almería, cada corporación ha afrontado el problema de una manera. Desde las carpas que promovió Fernando Martínez (PSOE) en la boca del río al proyecto Abierto hasta el Amanecer que se puso en marcha con Santiago Martínez Cabrejas (PSOE) y que ofertaba talleres o deportes en horario de madrugada. El actual alcalde, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador (PP), ha optado por que voluntarios expliquen en el mismo botellón los efectos que tiene el consumo de alcohol y de cannabis.