Los fieles del imán de Fuengirola ven su prisión como "ataque al islam"

Los miembros de la comunidad musulmana y de otros colectivos que ayer se concentraron en la mezquita de Fuengirola (Málaga) en contra del ingreso en prisión del imán Mohamed Kamal Mostafa, condenado a quince meses de cárcel por provocación y discriminación contra las mujeres, lo tenían claro. La medida es "un ataque al islam y a los musulmanes", aseguró el portavoz de la comunidad islámica Suhail, Javier Isla, algo que cree no sólo el imam, sino "todo el mundo".

"No creo que sea un escarmiento, hay gente que ha violado o pegado y está en la calle", opinó Isla. "Hay curas que han dicho barbaridades y no se les ha tocado un pelo", añadió.

"Lo que ocurre es que todo lo que está relacionado con el islam suena mal", dijo Isla, en relación con el contexto del terrorismo de grupos extremistas.

El imam reiteró que "está en contra de pegar a las mujeres" y que en su libro La mujer en el islam se limitaba a hacer "una narración del libro sagrado". "He hecho lo que haría cualquier dirigente espiritual o investigador científico, hay que decir lo que ya está escrito", afirmó.

Kamal se encuentra en espera de que se resuelva el recurso presentado contra el auto del Juzgado de lo Penal número 12 de Barcelona, que ordena su ingreso en prisión sin conceder la suspensión de la condena por su "peligrosidad social", algo que él niega. La medidad cuenta con el apoyo del fiscal. "Soy un padre de familia, ayudo a la gente y la saco del mal camino", dijo. En caso de que se resuelva en su contra, presentará una petición de indulto, para lo que la comunidad de Fuengirola ya está recogiendo firmas.

Manuel López, asesor jurídico de la comunidad, explicó que Kamal no recurrió la sentencia en su día "porque se le dijo que no tendría que entrar en prisión, al ser la pena menor a dos años".