La Feria del Libro Antiguo de Sevilla regala una reedición de una obra de Chaves Rey del siglo XIX

Más de 500.000 volúmenes, desde los escasos ejemplares del siglo XVI hasta las enciclopedias Álvarez que se usaban en las aulas de 1950, se exhiben desde ayer en la 27ª edición de la Feria del Libro Antiguo de Sevilla. Las 22 casetas que integran la feria, dos más que el pasado año, estarán instaladas en la Plaza Nueva hasta el 8 de diciembre.

"Para esta feria, que a algunos nos emociona más que otras de las que celebran en la ciudad, hemos recuperado un libro muy raro y dificil de encontrar: Páginas sevillanas, de Manuel Chaves Rey (el padre de Chaves Nogales), que se imprimió en la desaparecida y prestigiosa imprenta Rasco de Sevilla en 1894", explicó ayer Juan Carlos Marset, delegado de Cultura del Ayuntamiento. El libro, del que se han tirado 1.000 ejemplares, se distribuirá de forma gratuita entre los visitantes a la feria.

De Páginas sevillana, según Marset, sólo se imprimieron en su día 150 ejemplares así que prácticamente había desaparecido. El Ayuntamiento volverá a editarlo en su colección de Clásicos sevillanos, un proyecto que el área de Cultura desarrollará a partir de este año en colaboración con la Academia de Buenas Letras y que recuperará unos cinco títulos cada año.

"En la edición anterior tuvimos unos 300.000 visitantes, muchos de ellos gracias a la presencia y el apoyo que nos prestó el escritor Arturo Pérez-Reverte; este año esperamos superar esa cifra", comentó ayer en Sevilla José Manuel Quesada, responsable de los libreros. La feria está organizada por la Asociación Amigos del Libro Antiguo de Sevilla y el área de Cultura del Ayuntamiento. "La mayoría de los participantes son andaluces, aunque también hay libreros de Barcelona, Madrid, Valencia. La verdad es que es difícil convencer a los profesionales de que participen en una feria cuando, actualmente, la mayoría de los ejemplares antiguos se están vendiendo a través de Internet.

La feria se ha sumado al cuarto centenario de El Quijote eligiendo como cartel la pintura El principio de la aventura de los molinos de viento, una de las obras de la serie sobre El Quijote que Muñoz Degrain realizó para la Biblioteca Nacional. Juan Carlos Marset adelantó también que gracias al Plan director de bibliotecas, aprobado ayer en el consistorio, Sevilla duplicará este tipo de instalaciones en ocho años. Actualmente existen 11 bibliotecas municipales en la ciudad.

"Ésto no es un proyecto, sino una realidad, porque el presupuesto para inversión en infraestructura en bibliotecas se ha duplicado y ha pasado de 300.000 a unos 600.000 euros; mientras que la cantidad destinada a adquisición de nuevos fondos ha pasado de los 30.000 a los 60.000 euros", afirmó Marset.

El responsable de Cultura adelantó también que se están ultimando los detalles de la cesión que el librero y editor Abelardo Linares ha hecho de su biblioteca personal a la ciudad, lo que supondrá unos 50.000 volúmenes casi todos primeras ediciones de los siglos XIX y XX.