El PP vaticina que los socialistas no podrán agotar esta legislatura

El Partido Popular afirma que "es imposible que esta legislatura pueda agotarse". El motivo, según argumentó ayer Eduardo Zaplana, portavoz en el Congreso, es la "múltiple inestabilidad" del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero: "Una creciente inestabilidad económica, con lo peores datos de inflación y crecimiento de los últimos años; una dramática inestabilidad territorial, en la que [Josep Lluís] Carod Rovira se permite presentarse en La Moncloa para poner en duda una lengua recogida legalmente en el bloque constitucional [el valenciano]; y sufre una creciente inestabilidad internacional, que será patente cuando el presidente del Gobierno tenga que negociar los fondos estructurales y de cohesión con ese amigo suyo al que regala jamones", Gerhard Schröder, canciller alemán.

Zaplana mantuvo que al PP le "conviene" que las elecciones generales, que deberían convocarse en 2008, sean "cuanto antes", y que él está "segurísimo" de que habrá convocatoria anticipada. Argumentó que el PP "está en condiciones de afrontar un proceso electoral en cualquier momento". Como elementos para justificar su "convicción" de que habrá adelanto electoral, Zaplana enumeró que "se harán insoportables espectáculos como las carreras por el Congreso de ERC para ver si se oponen a los Presupuestos", las "visitas a La Moncloa de Carod para corregir al presidente sobre qué lenguas existen y cuáles no", el empeoramiento de la economía, "con más inflación y menos crecimiento", o "tener que reformar el Código Penal y despenalizar los referendos ilegales sólo para que [Juan José] Ibarretxe acudiera a la conferencia de presidentes".

Portavoces del 11-M

Junto a estos "elementos", el PP pretende seguir haciendo de la comisión del 11-M una baza de oposición política al Gobierno. Zaplana aseguró ayer en el Congreso que su grupo se opondrá a que se cierre la comisión de investigación tras las comparecencias de José María Aznar, el día 22, José Luis Rodríguez Zapatero, el día 29, y la representante de las víctimas de los atentados de los trenes de cercanías, Lara Escribano, el 1 de diciembre. Zaplana insinuó que el PP estudia cambiar a sus portavoces de esa comisión para dar más relevancia política a las comparecencias de Aznar y Zapatero, y recalcó que su grupo "se niega" a que el interrogatorio al ex presidente del Gobierno tenga "un formato distinto" al de los demás comparecientes. "No queremos trato de favor para Aznar", subrayó.

Cuando concluyan esas comparecencias, el PP reclamará que la comisión siga sus investigaciones. Recordará que aún no han prestado declaración muchas personas que el PP pidió fueran llamadas y enarbolará las informaciones aparecidas desde septiembre para reclamar que se vuelva a llamar a algunos mandos policiales y se cite a otros nuevos. Todo ello, según Zaplana, "hasta que se sepa toda la verdad".