El comité de Babcock exige a la SEPI que busque otro dueño si falla ATB

El comité de empresa de Babcock Borsig España (BBE) exigió ayer a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) que obligue a los actuales propietarios de la firma, el grupo austriaco ATB, a cumplir los compromisos que adquirieron al comprarla y, en caso contrario, que busquen un nuevo adjudicatario.

Conscientes de que la reintegración de Babcock en la sociedad estatal no es posible y, tras constatar una cadena de "flagrantes" incumplimientos por parte de ATB, los sindicatos con representación en la compañía reclamaron en una rueda de prensa la búsqueda de "otras alternativas empresariales", inform Vasco Press.

"No tenemos ningún miedo de que nos quiten al comprador porque carece de toda viabilidad; si éste no vale, que lo quiten", recalcó el representante de ELA, Carlos Corral. Con este fin, los sindicatos han pedido a la SEPI, el PSOE y el Gobierno vasco que trabajen conjuntamente en la búsqueda de una salida a la crisis.

El presidente del comité de empresa, Alfredo Laureiro, de UGT, calificó la situación de BBE de "delicada y muy preocupante". Según aseveró, casi diez meses después de la venta a ATB y casi cuatro de la aprobación del expediente de regulación de empleo, el grupo austriaco no ha cumplido con sus obligaciones financieras (se comprometió a aportar una línea de avales de hasta 100 millones), ni goza de credibilidad en la banca, ni ha dado a conocer la situación económica de su matriz, ni ha realizado transferencias de tecnología ni desviado carga de trabajo del resto de sus filiales.