Marciano Gómez justifica su salida por la "ruptura de un proyecto"

"El nuevo organigrama me dejaba sin competencias y me voy". El ex secretario autonómico para la Agencia Valenciana de la Salud (AVS), Marciano Gómez, justificó ayer su renuncia al cargo de número dos de hecho de la consejería al entender que la decisión del consejero de Sanidad, Vicente Rambla, de sustituirle una vez se ponga en marcha en enero la AVS, "aborta un proyecto que puse en marcha hace nueve años" y que "a tenor de los resultados no va nada mal". La oferta que le planteó Rambla el viernes pasado fue la creación de una nueva secretaría de Salud, sin funciones definidas, una opción que rechazó. "Trabajo por revertir a la sociedad mis conocimientos en gestión, no por un sueldo ni un cargo". En este nuevo destino "no podría aportar nada nuevo", por lo que "por ética y honestidad decido irme".

En 1995, de la mano del ex presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, Gómez saltó de una plaza de interino en las puertas de urgencia del hospital la Fe de Valencia a la dirección general de Asistencia Especializada. Junto a este cargo, ha ocupado también la dirección general para la Prestación Asistencial y ha sido subsecretario. Recientemente ganó una plaza definitiva en la Unidad de Corta Estancia de la Fe en una polémica oposición.

Independientemente del consejero -Joaquín Farnós, José Emilio Cervera, Serafín Castellano y el propio Rambla-, Gómez se fue asentando y acumulando competencias. En su primera etapa, coincidió como director general con Rambla, éste al cargo de la dirección económica, la persona que ha forzado su relevo.

Nuevo equipo

¿Por qué el cambio? "El consejero sabrá las razones, aunque tengo que decir que él decide legítimamente y está entre sus competencias. Supongo que querrá hacer su equipo, y tengo que decir que Manolo [Manuel Cervera, su sustituto] es una persona excelente". Desde la consejería, se apuntó que Gómez llevaba "mucho tiempo" en el mismo cargo y que se ha optado por una persona nueva "que lo ha hecho muy bien". Las mismas fuentes señalaron que la sustitución al frente de la secretaría autonómica no supondrá ningún cambio de estrategia -Gómez fue uno de los artífices de la política de conciertos- y que no se esperan más relevos "al menos de momento".

La salida de Marciano ha dejado un ambiente enrarecido entre algunos directores de hospitales (muchos nombrados por él) e incluso de directores generales (algunos vinculados a Zaplana) que han manifestado su apoyo a Gómez, según ha sabido este diario. El ex alto cargo prefirió no manifestarse sobre la posibilidad de que alguno de ellos deje su cargo y sólo comentó, respecto a los que denomina "mi equipo", que "cada uno en ejercicio de su libertad hará lo que crea según sus principios". Insistió en que todos están en "un proyecto", iniciado hace nueve años.

La pérdida de poder de Gómez, paulatina en los últimos meses, no es ajena a su estrecha relación con Zaplana, su principal valedor.