Olivas sostiene que el mercado somete a las cajas de ahorro al mismo escrutinio que a los bancos
El presidente de Bancaixa recuerda la creación de un área de responsabilidad corporativa
José Luis Olivas, presidente de Bancaixa, explicó ayer a un grupo de alumnos de la Universidad de Valencia que las cajas de ahorro no son "ajenas al control del mercado", que es injusto atribuirles "una gestión no homologable" al resto de entidades financieras y que es falso que sean menos "eficientes" que los bancos. Muy al contrario, Olivas aseguró que las cajas de ahorro están sometidas al "escrupuloso escrutinio de los mercados e inversores" y que la calidad de su gestión y los riesgos que asumen son evaluados del mismo modo que se analiza la gestión de los bancos que cotizan en bolsa.
Las 1.057 sucursales previstas en 2007 serán operativas a finales de 2005
"Bancaixa es un emisor creativo e imaginativo de productos financieros"
Ángel Torre, presidente de la Bolsa de Valencia, presentó la conferencia de Olivas y no eludió ninguno de los cargos públicos y orgánicos que jalonaban su carrera profesional antes de llegar a la presidencia de Bancaixa, una relación en la que destacan un año al frente de la presidencia de la Generalitat y nueve al frente de la secretaría regional del PP de la Comunidad Valenciana.
Olivas, que asumió la presidencia de Bancaixa apenas seis meses después de dejar la presidencia de la Generalitat, se mostró, sin embargo, como un financiero independiente y muy consciente del análisis continuado al que le someten los inversores y los mercados.
El presidente de Bancaixa dictó la lección inaugural de un curso sobre mercados e intermediarios financieros para alumnos de la Facultad de Económicas. Y aprovechó la ocasión para disipar cualquier duda sobre una supuesta posición de privilegio de las cajas de ahorro, que ni cotizan en bolsa ni están obligadas a distribuir dividendos entre sus accionistas, respecto a otros actores del sistema bancario.
Olivas introdujo sus reflexiones con una mención a la creación de una comisión específica en el seno de Bancaixa destinada a cuidar la responsabilidad corporativa y las normas de buen gobierno. Las últimas modificaciones legales sobre transparencia financiera obligan a todas las sociedades que cotizan en bolsa a disponer de tales órganos. Las cajas, que no cotizan, no están obligadas a constituirlos. Olivas aseguró que la decisión de crear la comisión de buen gobierno pretende situar a Bancaixa en una posición de "ventaja competitiva" cuando tal exigencia se extienda al resto de cajas de ahorro. El elogio de la transparecencia precedió a la loa a los mercados.
"Los clientes determinan nuestro peso", afirmó Olivas. Y a continuación subrayó la intensa actividad desarrollada por Bancaixa como entidad emisora para asegurar que la supervisión de la calidad de su gestión es "escrupulosa".
Bancaixa, efectivamente, es un emisor "imaginativo y creativo", según había anticipado Olivas. A lo largo de 2003 la caja valenciana gestionó la mayor operación de titulización de créditos desarrollada en España. Bancaixa vendió créditos hipotecarios valorados en 2003 en 2.000 millones de euros, cuyos beneficios serán recibidos por los propietarios de los títulos.
En 2004, Bancaixa ha organizado una operación similar en la que, por primera vez en España, se han vendido títulos de créditos concedidos para la compra de locales comerciales y fincas rústicas.
Olivas completó su particular disertación sobre la relación entre bancos y cajas de ahorro en el mercado financiero con los datos sobre eficiencia en la gestión recabados por el Banco Santander en el conjunto del sistema bancario español. Olivas recordó que el Banco Santander situó a Bancaixa en el primer lugar entre las entidades financieras españolas por su eficiencia y capacidad para generar economías de escala, es decir, por la calidad de su gestión.
La disertación de Olivas vino precedida por una sucinta exposición del plan estratégico de Bancaixa que pretende duplicar el volumen de negocio y los beneficios de la entidad a finales de 2007. Las previsiones del plan elevan a 80.000 millones de euros el volumen de negocio previsto a finales de 2007 y sitúan los beneficios en 375 millones de euros.
El presidente de Bancaixa anticipó que las 1.052 sucursales previstas a finales de 2007 serán operativas a finales de 2005. Durante el primer semestre de 2004, Bancaixa ha inaugurado 80 nuevas oficinas, "dos nuevas sucursales al día".
El plan de expansión territorial pretende cubrir todas las capitales de provincia a lo largo del próximo ejercicio.
Pero, sobre todo, captar clientes. Olivas explicó a los universitarios que las 307 entidades financieras, bancos y corporaciones de crédito que constituían el sector financiero español en 1998 se redujeron a 269 en 2003. En paralelo, los clientes tienden a concentrar sus cuentas en un número cada vez menor de entidades. El objetivo de Bancaixa es ser accesible al 65% de la población española en 2007 y ofrecer la mejor eficiencia del mercado. Si hoy invierte 50 euros por cada 100 que capta, en 2007 espera invertir solo 39.
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