El alcalde de Andoain pide que se identifique y castigue a los asaltantes

José Antonio Pérez Gabarian ha sido esta semana protagonista a su pesar por el asalto de los radicales a la casa consistorial de Andoain que él preside y la polémica que le ha seguido.

Pregunta. Consiguieron un acuerdo unánime de condena al asalto del ayuntamiento pero sin mencionar a la Ertzaintza, ¿fue costoso lograrlo?

Respuesta. Somos conscientes de las diferencias que tenemos los partidos si queremos sacar un tema de estos por unanimidad. Nos reunimos los portavoces del PSE y PP, los del gobierno, y decidimos proponer un acuerdo sólo de condena y no hubo ningún problema para aprobarlo.

P. ¿Cree que esto refleja que hay indignación general, de todos, por el asalto?

R. En el pueblo sí ha causado indignación, por lo que me dicen los ciudadanos. Pero creo que sí hay rabia en los partidos. Como socialistas hemos pedido que nuestros ayuntamientos apoyen esta moción y hoy mismo [el jueves 21] hemos recibido el apoyo del pleno del ayuntamiento de Astigarraga que gobierna EA-PNV.

"Los socialistas de Andoain procedemos de EE, somos políticamente mayores y les ha hecho daño que nos mantengamos como símbolo de libertad"

P. ¿Qué persiguen con la denuncia y hasta donde están dispuestos a llegar?

R. Queremos que se aclaren los hechos y que no se vuelvan a repetir. Pedimos que se identifique a los asaltantes a través de las imágenes que aparecieron en ETB en las que se veía el interior del consistorio, por lo que deducimos que las cámaras entraron durante el allanamiento. Allí se veía a responsables de la izquierda abertzale de todo Euskadi, pero es la Ertzaintza la que tiene que identificarlos y la denuncia irá al juzgado. Aunque desconocemos las directrices que tienen los ertzainas.

P. ¿Cómo se enteró del asalto y qué hizo al saberlo?

R. Estaba paseando cuando me llamaron a las once y cuarto de la mañana. Me acerqué para controlar los acontecimientos y llamé a mi lado a todo el equipo de gobierno. Ya entonces la policía municipal había avisado a la Ertzaintza y le habían respondido que las órdenes las tenía que dar el alcalde. Desde las once y media hasta una hora después tuve cinco conversaciones, fluidas, en las que pedí que les desalojaran. Y advertí de que en el salón ocupado había documentación importante del Tribunal Vasco de Cuentas, incluso les dije que cuando llegaran, probablemente sería tarde. Bueno, pues a las dos menos cuarto llegó una dotación de atestados con tres policías.

P. Los sindicatos le han dado la razón en sus críticas a la dirección política de la Ertzaintza.

R. Y se lo he agradecido porque, salvo ELA, ellos dicen muy claro que no hubo voluntad política de actuar y que los ertzainas de base estaban dispuestos a ello y se lo pidieron a la dirección. Incluso afirman que con efectivos de Hernani, Tolosa y San Sebastián se podía haber actuado.

P. Pues la portavoz del Gobierno vasco y la consejería de Interior han dicho que miente.

R. Por la manera en que se están comportando me parece que algo les está haciendo daño. He pedido las cintas de mis cinco conversaciones con los mandos de la Ertzaintza para que se vea la verdad, que no miento, porque estoy convencido de que mi actuación como alcalde fue la correcta. Otra cosa bien distinta es la crítica política que hago al denunciar que no se actuó por una decisión política.

P. Responsables de las plataformas ilegalizadas han dicho que no fue un asalto violento, sino una ocupación pacífica.

R. Primero, fue planificado y organizado; segundo, la mayoría no son ciudadanos de Andoain; tercero, entran por narices y fuerzan y rompen las dependencias municipales. Eso no es ocupar pacíficamente, es allanar la casa municipal que es la representación de todos los ciudadanos de Andoain.

P. ¿Cómo ha cambiado el ambiente en el pueblo desde que ha vuelto a gobernar el PSE?

R. Desde que estamos hace más de un año el ambiente es totalmente relajado.Tenemos un programa municipal que nos está dejando trabajar a todo el mundo, hasta los de Batasuna. Hoy mismo hemos tenido un pleno ordinario y no ha venido nadie, ni de ellos. No tenemos ningún problema salvo las discusiones políticas que hoy giran en torno al plan Ibarretxe y al Estatuto.

P. ¿Cree que desde que están fuera del gobierno municipal y del ayuntamiento los radicales ya no piensan que la calle es suya?

R. Ellos mismos se han creado el problema y la Ley de Partidos les ha hecho mucho daño. No participan en la vida municipal y en las movilizaciones de su propia organización interviene muy poca gente. Parece que organizativamente les falta algo. Yo que, como alcalde, tengo que ser plural ,les reconozco el derecho a participar y ser elegidos, pero eso es algo que está en sus manos: el condenar la violencia.

P. ¿Suele hablar con ellos?

R. Yo hablo con todos los ciudadanos, pero no con los dirigentes radicales. A ellos les veo frustrados y reconocen que está ahí pendiente el tema de la violencia.

P. Ustedes la han padecido más que nadie. Quemaron la casa del edil Estanis Amuchastegi.

R. Eso fue en los meses que todavía tenían organización y lo hicieron como lo tenían planificado. Después, el endurecimiento de las penas por la Ley de Partidos les ha sujetado. Pero sabemos que los planes y las informaciones siguen vigentes y tres de nuestros concejales tienen que vivir fuera del pueblo por seguridad.

P. Están tan amenazados que resulta insignificante que aprueben la moción de apoyo de Eudel.

R. Creo que la aprobamos, pero ni la hemos puesto en práctica. Somos un municipio un tanto autónomo, que vamos un poco por libre hasta en el partido, pero tenemos el compromiso de seguir luchando por nuestros compañeros. Los radicales pretendían que los socialistas desaparecieran de Andoain, que nos fuéramos y así quedarse con el pueblo. Casi todos los ediles procedemos de Euskadiko Ezkerra, y todas estas presiones y amenazas las hacían para eliminarnos de aquí. Porque somos gente políticamente mayor, que llevamos muchos años en esto y les ha hecho mucho daño el que hayamos podido mantenernos y que, además, nos hayamos convertido en el símbolo de la lucha por la libertad, una lucha que estamos ganando.