Barroso no logra el acuerdo de la Eurocámara sobre la futura Comisión
El nuevo presidente desafía a los diputados y mantiene todas las competencias de Buttiglione
Ni cambio de cartera ni retoque de competencias. El presidente electo de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, propuso ayer a la Eurocámara mantener como comisario de Justicia, Libertad y Seguridad a Rocco Buttiglione con todas sus competencias. Como única concesión, Barroso promete dar prioridad a las políticas de igualdad y no discriminación a través de un equipo presidido por él mismo y formado por tres comisarios, en el que estaría Buttiglione. Sólo el Partido Popular Europeo y la extrema derecha mantuvieron su apoyo a la investidura del nuevo Ejecutivo europeo.
Tanto el líder de los socialistas, Martin Schultz, como el de los liberales, Graham Watson, se vieron sorprendidos por el órdago del presidente electo de la Comisión Europea, que tomará posesión de su cargo el 1 de noviembre. "Tras mi entrevista con Barroso el martes pasado yo esperaba otra cosa", confesó Schultz. "Esta decepción que hemos sufrido tanto Watson como yo no refuerza en modo alguno la confianza que nos merece el presidente electo... Nuestro voto será negativo, salvo que haya un cambio considerable por su parte".
Los únicos grupos que mantienen su confianza en el equipo de Barroso no suman la mayoría suficiente para que el próximo miércoles, en sesión plenaria, se apruebe la investidura. El Partido Popular Europeo (PPE; 268 escaños) y Unión por la Europa de las Naciones (UEN; 27) suman 295 votos de un total de 732. Pero lo cierto es que los liberales (88 escaños), si bien mostraron profundas reservas, han dejado para la próxima semana su decisión. Watson especula con que la mitad de su grupo termine votando a favor, aunque ayer, algunas fuentes señalaban que hasta el 70% de sus miembros podrían mantener su veto.
En la Eurocámara molestó especialmente la persistencia de Barroso en mantener a su equipo y apelar, además, a la responsabilidad para evitar una crisis institucional a la que tanto Borrell como Schultz restaron importancia -"así es la democracia", dijeron-. El Grupo Independencia y Democracia (37 escaños), que hasta ahora había mantenido su apoyo a la nueva Comisión, anunció ayer también sus reservas. Los Verdes (42 escaños) e Izquierda Unitaria (41) insistieron en su veto total a un equipo que, según el verde Daniel Cohn-Bendit es "aberrante".
Barroso sigue confiado en que obtendrá la luz verde del Parlamento Europeo, para lo cual sería suficiente obtener una mayoría simple de los votos emitidos. En la Eurocámara no son raras las deserciones individuales a la hora de votar, lo que ni siquiera se descarta dentro del PPE, aunque su líder, Hans-Gert Poetterin, aseguró que su grupo está cohesionado y que sólo un miembro británico se ha pronunciado contra la nueva Comisión.
"Mi equipo es el más progresista de la historia, con ocho mujeres, gracias a mi insistencia de que los gobiernos enviaran a mujeres", dijo Barroso, quien añadió que no admite dudas sobre su posición en contra de cualquier discriminación. También hizo notar la importancia de la carta que le ha enviado Buttiglione pidiendo excusas a las mujeres y a los homosexuales y asegurando que se abstendrá en los asuntos en los que crea que haya conflicto entre su conciencia y sus obligaciones en el cargo.
Buttiglione fue vetado por la Comisión de Libertades del Parlamento Europeo por considerar pecado la homosexualiad y estimar que el matrimonio es la institución que permite a las mujeres tener hijos bajo la protección del hombre. Es la primera vez que la Eurocámara, que no puede rechazar a un comisario, pero sí a la Comisión en su conjunto, vota en contra de un comisario.
El centro-izquierda le había exigido a Barroso que prescindiera de Buttiglione o que, al menos, le cambiara de cartera, posibilidades ambas de difícil solución porque el presidente de la Comisión atribuye las carteras, pero en colaboración con los gobiernos nacionales.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.