"Kerry no terminó la faena, y podía haberlo hecho"
En la década de los ochenta del siglo pasado había un gran personaje en la vida política y económica norteamericana. Su nombre: Paul Craig Roberts. Sirvió como alto cargo de Ronald Reagan en la secretaría del Tesoro, y más tarde en el Congreso, pero, además, Roberts escribía de manera regular en The Wall Street Journal, de cuyo consejo editorial formaba parte. Republicano, inspirador de la política de la llamada Reaganomics, el economista, de 65 años, vive en California, es consejero de varias multinacionales y se ha convertido en un disidente, una afición que le ha costado un castigo despiadado por parte de las publicaciones neoconservadoras. "No sé lo que pasará el 2 de noviembre. Cuando yo era joven teníamos una prensa liberal, pero esa ya no existe. Kerry ganó el debate ayer, pero la prensa se resiste a decirlo. Los neoconservadores dominan los medios", dijo a EL PAIS ayer.
Pregunta. ¿Ganó ayer Kerry el debate o perdió Bush?
Respuesta. Creo que Kerry hizo un buen debate y que Bush lo hizo muy mal. Se le veía derrengado, agotado. Pero Kerry no terminó la faena, y podía haberlo hecho.
P. ¿Cómo?
R. La guerra de Irak es una idea que ya en la época en la que yo estaba en la Administración, en los años ochenta, rondaba en algunos memorándums. Y hace mucho tiempo de ello. La idea era reestructurar Oriente Próximo, convertir la zona en lo más parecido a Israel. Bush no tenía agenda al ganar en el año 2000. Cuando tuvo lugar el ataque del 11 de septiembre de 2001, los neoconservadores desempolvaron sus viejos planes. Y de allí emergió, otra vez, Irak. La noche del jueves, Kerry puso al descubierto a Bush, pero no estoy del todo convencido de que haya entusiasmado a sus propios electores.
P. ¿Acaso no dijo lo que querían oír, es decir, que Bush había engañado a la nación?
R. Es verdad que lo dijo, pero, fíjese, ambos se dirigieron ante todo a sus propios votantes. Bush, con el argumento de que todo está en orden; Kerry, con la idea de que si bien Sadam Husein representaba un peligro, la guerra fue un error. Mientras Bush llega a sus votantes, no sé si Kerry lo hace del todo. ¡Porque el tema de fondo es que Sadam no representaba ningún peligro! Entonces ¿por qué Kerry admite que sí lo era? En este punto, Bush ha logrado llevarle al mejor terreno para enredarle. Kerry debió haber dicho claramente que Sadam fue un invento de los neoconservadores que rodean a Bush. Y punto.
P. ¿Tiene dudas sobre quién ganó el debate?
R. No, por supuesto que Kerry estuvo muy presidencial. Yo creo que la gente se dará cuenta de que con una Administración Kerry se podrá resolver el desaguisado que Bush, su asesor Karl Rove y los neoconservadores han creado en Oriente Próximo. Y la gente, creo, piensa que si Bush gana, va a embarcarse en nuevas aventuras en los próximos cuatro años. Yo mismo lo pienso. Mire, tengo un hijo que está en edad de hacer el servicio militar. No pienso quedarme con los brazos cruzados esperando la próxima guerra. Pero hay cosas que Kerry podía haber dicho...
P. La economía de EE UU será objeto del próximo debate, ¿Cómo califica la situación actual?
R. Nunca hemos vivido un ciclo tan débil de recuperación como el actual. Tres años después, seguimos con una economía que no crea empleos en la industria manufacturera. Los únicos empleos que se ofrecen están en el sector de servicios. Yo digo que nos hemos convertido en un país del Tercer Mundo. Porque hemos renunciado a nuestra fuerza industrial. Cuando la gente habla de déficit comercial debería saber a qué se está refiriendo de verdad...
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