La alcaldesa de Balanegra anuncia en su encierro una huelga de hambre

La alcaldesa de Balanegra (Berja, Almería), Mercedes Tapia (PP), anunció ayer, en su decimoséptimo día de encierro en el Ayuntamiento de Berja, que el viernes iniciará una huelga de hambre. El anuncio de Tapia fue realizado desde los balcones del Ayuntamiento. La alcaldesa salió a agradecer la solidaridad de sus vecinos, que, en un número aproximado al millar, se concentró ayer ante el Consistorio en su apoyo.

Haciendo esfuerzos por contener la emoción, Mercedes Tapia anunció a los vecinos que pudieron verla que el viernes iniciará una huelga de hambre para "intensificar" su protesta. Los balanegrenses, con su alcaldesa a la cabeza, aseguran tributar a Berja 1,2 millones de euros en concepto de impuestos directos mientras que en el presupuesto tienen asignados sólo 240.00 euros.

Los vecinos de la Entidad Local Autónoma (ELA) de Balanegra cumplieron ayer a rajatabla la jornada de paro total convocada en la entidad. La negativa de la Policía a dejar a los vecinos visitar a Tapia provocó momentos de tensión. Al Ayuntamiento de Berja sólo pudieron acceder ayer ciudadanos virgitanos con DNI en mano. La negativa de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado a dejar pasar tanto a periodistas como a los vecinos de Balanegra dentro del Ayuntamiento motivó que un grupo de exaltados zarandearan la puerta del Consistorio en un amago de forcejeo. Los vecinos pidieron entrar pacíficamente en grupos de diez en diez pero les negaron la entrada. Tras la insistencia de los concentrados y dado que los ánimos se caldeaban, un grupo de cuatro vecinos se pudo reunir con el alcalde de Berja, Serafín Robles (PSOE). Sin embargo, tras casi dos horas de reunión, los cuatro vecinos de Balanegra salieron del Ayuntamiento sin ningún tipo de acuerdo.

Tras el infructuoso encuentro, los vecinos allí concentrados empezaron a tirar huevos a la fachada del Ayuntamiento y mostraron su malestar con pitos y palmas, además de cortar las calles de acceso al municipio de Berja.