Sevilla defiende una conferencia "política, anual y en La Moncloa"

El ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, defendió que la conferencia de Presidentes tenga un "contenido político"; se celebre con "carácter anual", aunque podría hacerlo "dos veces al año"; abogó por la presencia del presidente del Gobierno, sin descartar la posibilidad de que adopte la fórmula de reuniones entre comunidades autónomas, y que se celebre preferentemente en La Moncloa. Sevilla hizo este pronunciamiento al finalizar la reunión y lo repitió en la conferencia de prensa posterior ante la insistencia de las comunidades gobernadas por el PP, que criticaban al Ejecutivo socialista por su "indefinición".

También se vio forzado a recordar que el Gobierno tiene un "modelo de Estado" ante las críticas de las comunidades gobernadas por el PP que, en su ronda, denunciaron su "carencia". El ministro precisó el alcance de la reforma constitucional que pretende, con sus cuatro puntos, así como los límites de las reformas estatutarias.

Sevilla insistió en que la pretensión del Gobierno al convocar a todas las comunidades autónomas para definir la Conferencia de Presidentes es para demostrar que "las comunidades autónomas también son Estado" y que, por tanto, "deben participar en la configuración" de dicha Conferencia. "Hemos querido escucharles y oír sus propuestas y el Gobierno ha planteado las suyas. Entre todos debemos ser capaces de hacer algo que no puede verse como una invitación unilateral sino como órgano de participación en el que desde el principio el propio procedimiento hace que sea de todos".

Fortalecer la cooperación

El ministro de Administraciones Públicas insistió en que la Conferencia de Presidentes será un "acontecimiento importante que ayudará y contribuirá a fortalecer los mecanismos de cooperación de las Administraciones" como "foro de debate de las diferentes concepciones sobre la España plural donde los presidentes traten los asuntos que afectan de forma más directa intentando buscar soluciones de cooperación y confrontación".

No obstante, fuentes gubernamentales se mostraban ayer pesimistas sobre el futuro de la Conferencia de Presidentes ante la actitud mantenida por los representantes de las comunidades gobernadas por el PP. "El PP no quiso convocar la Conferencia de Presidentes en los ocho años que gobernó. Y ahora va a tratar de impedir que lo hagamos los demás".

La siguiente convocatoria de la reunión preparatoria la hará el Gobierno el 4 o el 18 de octubre, con la pretensión de lograr que las comunidades gobernadas por el PP se pronuncien sobre el perfil de la Conferencia antes de fijarla para el mes de noviembre. En fuentes gubernamentales no descartan que, una vez celebrado el congreso del PP, entre el 1 y el 3 de octubre, se suavicen las posiciones en el primer partido de la oposición.