Las ayudas públicas a equipos de fútbol, en el punto de mira de la UE

La concesión de ayudas públicas a los clubes profesionales es una práctica que incluso la UE ha puesto bajo sospecha. Esta misma semana, el portavoz de Competencia de la Comisión Europea, Tilman Lueder, ha pedido a las autoridades de España, Alemania, Francia, Italia y el Reino Unido información sobre posibles ayudas públicas ilegales al fútbol profesional. En el caso español, el regulador europeo aún mantiene abiertas las diligencias a raíz de la venta de los terrenos de la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid, una operación urbanística por la que la entidad ingresó 480 millones de euros en 2001. Bruselas investiga si el dinero pagado se ajustó al precio de mercado o hubo trato de favor.

En Euskadi se han dado casos de importantes ayudas económicas entregadas a los clubes profesionales sin contraprestación alguna y que han sido desautorizadas por el Tribunal de Cuentas (TVCP). En una auditoria reciente, este organismo concluyó que la Diputación de Guipúzcoa incurrió en irregularidades graves al dar, en 2002, una subvención de nueve millones a la Real. La partida, concedida sin mediar concurso, se justificó como una inyección económica para construir el complejo deportivo Zubieta XXI, aunque después el consejo de la Real contabilizó los nueve millones en su presupuesto como un ingreso más.

Ese mismo año, la Diputación vizcaína libró seis millones a favor del Athletic. Se dijo que la ayuda respondía a un convenio, aunque el TVCP demostró que, en verdad, era una subvención directa, puesto que no figuraban por ningún lado las obligaciones que asumía el club a cambio de recibir el dinero. Por el contrario, los ayuntamientos de las tres capitales se resisten a conceder beneficios a los clubes a costa de hipotecar futuros desarrollos urbanísticos.