Bruselas pone en duda la legalidad de los comicios chechenos

La Unión Europea, que mantiene una larga discrepancia con el modo en que Rusia afronta la crisis de Chechenia, ha reaccionado con señales contradictorias ante las elecciones presidenciales del domingo pasado. Mientras la Comisión deploraba que los comicios no hubiesen sido limpios, la presidencia holandesa reconocía comprensivamente las difíciles circunstancias en que se celebró la consulta.

Tras reconocer que se carecía de información de primera mano porque la Comisión no había enviado observadores a Chechenia, dada la situación de inseguridad, Emma Udwin, portavoz del comisario de Relaciones Exteriores, Chris Patten, dio por buenos los informes recibidos de otras fuentes, según los cuales, las elecciones no habían sido limpias. "Deploramos la exclusión arbitraria de uno de los candidatos más fuertes", agregó Udwin, antes de señalar que Bruselas va a pedir a Moscú que celebre, según lo legalmente establecido, en tres meses y sin retrasos, elecciones parlamentarias. Esa consulta, al contrario de lo ocurrido el domingo, deberá ser limpia, señaló la portavoz.

Udwin intervino antes de que las autoridades chechenas confirmaran que los comicios legislativos se celebrarán en un plazo de tres meses y cuando todavía se pensaba que iban a ser pospuestos hasta la próxima primavera.

Difíciles circunstancias

En La Haya, Bernard Bot, ministro holandés de Asuntos Exteriores y presidente de turno la UE en este semestre, evitó el enfrentamiento diplomático al reconocer las difíciles circunstancias en que se celebraron los comicios. Bot expresó su esperanza en que el nuevo presidente checheno y el Gobierno de Moscú renueven sus esfuerzos para comenzar un proceso que lleve a un auténtico acuerdo político basado en el diálogo, la reconciliación, el respeto a los derechos humanos y la restauración del imperio de la ley.

Los organismos europeos de Bruselas y el Gobierno de Rusia vienen largamente discutiendo sobre la situación en la república caucásica, lo que en ocasiones ha llevado a las autoridades rusas a considerar que la UE incurría en actos de politización inamistosa.

El pasado mes de abril, por ejemplo, la UE presentó ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU una resolución en la que condenaba en los más duros términos "las serias violaciones de los derechos humanos y del derecho humanitario internacional en Chechenia", de las que daba ejemplos concretos: "desapariciones, ejecuciones extrajudiciales, torturas, malos tratos, detenciones arbitrarias y secuestros".