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Reportaje:

Dos estrellas sobre el escenario

Valery Gergiev y Juan Diego Flórez reflexionan sobre la música a su paso por la Quincena

Es semana de grandes nombres en la Quincena Musical donostiarra. El tenor Juan Diego Flórez (Lima, 1973), considerado un astro de la lírica, subirá mañana al escenario del Kursaal para protagonizar la ópera de Rossini La donna del lago en versión de concierto. En el aire de la sala permanecerá todavía el recuerdo del movimiento de la batuta de uno de los directores más prestigiosos del momento: Valery Gergiev (Moscú, 1953), quien el domingo y ayer encabezó a la Orquesta Filarmónica de Rotterdam.

El cantante y el director, el primero en Pamplona y el segundo en San Sebastián, reflexionaron ayer ante los medios de comunicación sobre sus actuaciones en el festival donostiarra y sus gustos musicales. "Se está perdiendo el miedo a interpretar y hacer conciertos de autores del siglo XX", afirmaba Gergiev horas antes de dirigir Romeo y Julieta, de Sergei Prokofiev. El director ruso lleva varios años reivindicando la figura y el trabajo de su compatriota, un compositor que "cada vez está más reconocido como un autor que triunfó en áreas muy diferentes", pero que, en su opinión, fue "ignorado" por el sistema soviético.

¿El público se encuentra ahora más preparado para entender la música de Prokofiev? "Romeo y Julieta es muy fácil de entender, es una obra muy conocida que llega mucho al público", respondió Gergiev, pero admitió que "los gustos del público están cambiando".El titular de la Filarmónica de Rotterdam resaltó que tanto el público como los músicos están perdiendo el miedo a autores como Prokofiev, Bartok o Sostakovich. "Hoy en día son aceptados sin problema, algo que hace diez o quince años no se daba", aseguró.

Gergiev reconoció que, como comentan los músicos de su formación, a veces es un director "impredecible". Y es que, a su juicio, "ser predecible no siempre es una ventaja". "Cuando se escuchan ahora determinadas obras de compositores como Beethoven o Berlioz, suenan predecibles; entonces, no son tan interesantes", sostuvo, antes de confesar que, en este momento, lo que más le motiva es "trabajar con orquestas jóvenes donde hay grandes músicos y realizar programas poco comunes y originales".

"La donna del lago es una ensoñación que cautiva por su inmensa belleza", aseguró, por su parte, el tenor Juan Diego Flórez en la presentación de la obra, que, bajo la dirección de Riccardo Frizza, se escuchará mañana en el Kursaal y el sábado en el auditorio Baluarte de Pamplona, en ambos casos con las localidades agotadas.

El programa, surgido de la colaboración entre la Quincena Musical donostiarra, la Fundación Pablo Sarasate y la Asociación Gayarre de Amigos de la Ópera, llevará al escenario a la orquesta Pablo Sarasate, el Orfeón Pamplonés y la banda de música La Pamplonesa, que contarán con un excepcional elenco de cantantes especializados en las óperas de Rossini. Junto a Flórez estarán la mezzosoprano italiana Daniella Barcellona, la búlgara Darina Takova, el estadounidense Gregory Kunde y los españoles Simón Orfila y Maite Itoiz.

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"Ésta es una de las más difíciles óperas que escribiera Ro-ssini, pero disponemos de un reparto de voces que harán de su música diáfana una ensoñación que cautiva", remarcó Flórez.

"Nosotros nos encargaremos de hacerlo todo muy sencillo de escuchar", bromeó el tenor. "Creo que el sonido y el estilo de la Orquesta Sarasate, el Orfeón Pamplonés y la banda La Pamplonesa son muy buenos y perfilan una música única en una obra complicada", afirmó Frizza.

El director de orquesta ruso Valery Gergiev, ayer en el Kursaal.
El director de orquesta ruso Valery Gergiev, ayer en el Kursaal.JAVIER HERNÁNDEZ

Mena canta a Victoria

El contratenor Carlos Mena (Vitoria, 1971), acompañado por Juan Carlos Rivera al laúd, la vihuela y la guitarra barroca y Carlos García Bernalt en el clave y el órgano, cerrará esta tarde (20.00) el Ciclo de Música de Cámara de la Quincena con el programa Entre lo divino y lo humano. La primera parte del concierto estará dedicada a obras religiosas de Tomás Luis de Victoria (Ávila, 1548-Madrid, 1611) transcritas para ser interpretadas en una sala de cámara.

"Va a ser original, porque probablemente muy poca gente haya escuchado polifonía de Victoria para laúd y voz", explicó Mena, tras apuntar que los temas que se escucharán en el Kursaal son un reflejo del disco Et Jesum, firmado por sus compañeros y él. La segunda parte de la actuación recogerá pequeñas escenas de óperas, zarzuelas o situaciones escénicas de los siglos XVII y XVIII.

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