Con las tarifas a remolque

El descontento ha ido creciendo entre los empresarios de grúas desde hace años. "Es un trabajo duro, con interminables vigilias, y fatal pagado". Una tarea, la de recoger coches averiados en calles y carreteras, que se paga "a unos 20 euros y pico". El Observatorio de Precios del Transporte del Ministerio de Fomento realiza cada año un cálculo de los costes del servicio que, según los gruistas, es un 80% mayor que las tarifas que cobran de las aseguradoras. La mayoría de los conductores pagan en sus pólizas de seguro la asistencia en ruta que la compañía acuerda a su vez en cada zona de España con las empresas, unas 1.100 que se agrupan en dos asociaciones. La Asociación Nacional de Empresas de Auxilio en Carretera (Aneac), con 670 empresas (4.000 grúas) y la Confederación Española de Empresas de Asistencia en Carretera (Cepas), con 450 empresarios y 2.000 grúas. Aseguran los gruistas que las compañías no suben las tarifas desde hace una década. "¿Sabes cuál es la subida anual en todo este tiempo? Diez pesetas", dice un profesional aragonés.

La patronal de las aseguradoras, Unespa, alega que no puede "pactar una subida general y unificada porque eso sería una concertación de precios prohibida por las leyes que protegen la competencia", explica Miguel Ángel Vázquez, director de Comunicación. Y aclara que el aumento de tarifas habrá de pactarse entre cada aseguradora y cada gruista, "porque no todos ofrecen el mismo servicio [algunos hacen reparaciones o buscan un hotel a los asegurados] ni en cada zona existe la misma competencia".

Los empresarios aducen que las presiones a las que se ven sometidos por las aseguradoras son "brutales". "Me quejé a Mondiale Assistance de las tarifas y de un plumazo me quitaron de su lista tras 12 años de trabajar juntos", se queja un profesional que pide anonimato. Lo que los gruistas llaman "amenazas y presiones que rozan la coacción", para Unespa es "simple negociación entre empresas en un mercado libre; la ley de la oferta y la demanda".

"Muchas de nuestras empresas están formadas por una sola grúa; son de autónomos, disponibles las 24 horas, 365 días al año. La abuela tiene que responder al teléfono a las tres de la mañana, y allá que va su hijo a sacar a alguien de una cuneta". En la empresa de Víctor, gruista de Barcelona, tres de sus ocho conductores "se han separado recientemente; este trabajo es muy sacrificado y las familias son las primeras en acusarlo".

Juan Emilio Albadalejo, empresario de Elche (Alicante), tiene más suerte que sus compañeros autónomos. Cuenta con 15 grúas que realizan unos 100 servicios diarios. "No podemos más; Estamos ahogados". Una grúa "normal" cuesta "más de 10 millones de pesetas" (60.000 euros), un remolque de camiones supera los 360.000. "Y el petróleo sigue subiendo...".

Un estudio de la Universidad de Alicante ha calculado que el coste de un servicio medio debe rondar los 56 euros para que salga a cuenta realizarlo. Eso sí, si se cumplieran todas las normas legales y de seguridad en el trabajo. "No se cumplen", dicen a coro los gruistas que esperan el resultado de las negociaciones. Según el estudio citado, cada grúa debería estar operada por 4,6 trabajadores para que cada uno cumpla su horario de trabajo con seguridad, pero la mayoría de las empresas no pasan de un operario por grúa. Algunas como Grúas Abril de Alicante tienen 40 empleados y 20 máquinas. Otras, como la de Julián Almaraz, de Oviedo, han pasado de las 24 grúas que manejaban en 2000 a las 12 con que trabajan hoy. "No las podía mantener todas", asegura Almaraz. Un conductor de grúa recibe un sueldo de "unos 1.500 euros", en función de "las horas que le eche". Los gruistas reconocen que en el sector no se paga a nadie lo que se debe: ni al trabajador, ni al fisco, ni a la Seguridad Social. "Lo peor es que estamos robando para las aseguradoras".

La vicepresidenta de Aneac, María del Carmen Ricart, muestra una tabla comparativa de los precios que se cobra en otros países de la UE. "En Portugal, que es el país más barato tras España, se cobra un mínimo de 30,8 euros por remolcar un turismo; en Alemania, 62,8". En todo caso, reconoce Ricart, "algo bueno ha tenido este conflicto con independencia de lo que se consiga". "Ahora los gruistas estamos unidos".