Ni perros ni paletas

Cada verano, las playas se llenan de bañistas jugando a las paletas. Los aparatos de radio dan a conocer el último éxito estival al paso de un vendedor de bebidas y alguna que otra caña de pescar clavada en la orilla sirve de improvisado arco para una señora con su perrito. Aunque muchos no lo sepan, la estampa va en contra de la mayoría de las normas de los ayuntamientos andaluces.

Málaga ha estrenado este año una nueva ordenanza que concreta las sanciones por el uso inadecuado de las playas. Unas recomendaciones que no pueden tomarse a la ligera. Las faltas leves pueden conllevar multas de hasta 300 euros y las graves, de hasta 3.000. Las infracciones más comunes son las siguientes.

- Llevar mascotas a la playa. La mayoría de las provincias prohíben el acceso de animales domésticos a la zona de baño. Se establecen excepciones como las carreras de caballos de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) o los perros lazarillos. Los propietarios son reacios a dejar al animal en casa. Ésta suele ser la principal causa de apercibimientos. En la capital malagueña se han dado 763 casos en lo que va de año.

- Vehículos en la arena. La norma que prohíbe aparcar en la playa es de obligado cumplimiento en toda España, se incluye dentro de la Ley de Costas de 1988. Lo común suele ser el uso de la playa para estacionar el vehículo cuando no hay suficientes plazas de aparcamiento. En el apartado de circulación es más común el uso de ciclomotores y cuatriciclos o quads. Sólo los vehículos de emergencias y socorrismo están exentos de cumplir esta norma.

- Las barbacoas y moragas. Se ha acabado la imagen del dominguero sudoroso dando vueltas a las chuletas de cerdo. Al menos con su barbacoa último modelo. Está prohibido cocinar fuera de los espacios habilitados por los municipios. En las playas que carezcan de estos medios es necesario pedir una autorización. Ojo, la infracción de esta norma tiene carácter grave. También es sancionable hacer hogueras sobre la arena o las rocas.

- Juegos (si molestan). En un sentido amplio, este apartado incluye el clásico juego de las paletas y cualquier cosa que implique una pelota. Las autoridades suelen ser permisivas cuando la playa no tiene mucha aglomeración. En todo caso, se puede permitir los juegos si se realizan a más de seis metros de los bañistas o en zonas acondicionadas para ello.

- Pesca con caña. Es una prohibición común para la mayoría del litoral andaluz. La restricción suele limitarse a las horas del día en las que la playa es visitada por los bañistas para evitar accidentes. En Málaga este horario es de 10.00 a 21.00.

- Venta ambulante. Tenga cuidado si se le acerca un señor hasta la sombrilla para venderle una lata de refresco. Estará participando de una infracción a las ordenanzas municipales. Algunos municipios permiten la venta autorizada y otros sólo multan la venta de productos alimenticios.

- Escuchar música. En Málaga se prohíbe el uso de aparatos de música, instrumentos o artefactos cuyo nivel de ruidos puedan molestar a los demás usuarios.

- Guardar el sitio. El Ayuntamiento de Almuñécar (Granada) ha emitido un bando por el que prohíbe reservar una zona de playa con "sombrillas, tumbonas y otros objetos para ocupar un lugar que no va a ser utilizado hasta varias horas después". Contra los acaparadores.