El Ayuntamiento investiga cuatro edificios de Vallcarca como posibles focos del brote de legionela
Dos nuevos casos elevan a 13 el número de afectados por legionelosis en Barcelona
La Agencia de Salud Pública de Barcelona espera saber antes de una semana si alguno de los cuatro edificios con sistemas de refrigeración revisados en los últimos días en el barrio de Vallcarca es el responsable del brote de legionela que ya ha afectado a 13 personas. Ayer se confirmaron dos nuevos casos de esta enfermedad, pero el Ayuntamiento considera que el brote ya "va de baja", puesto que los síntomas en ambos pacientes comenzaron antes del día 3 de agosto. Desde este día ninguna otra persona ha comenzado a desarrollar la neumonía por legionela.
Los dos nuevos casos de legionelosis conocidos ayer son los referentes a dos hombres de 54 y 55 años residentes en el barrio de Vallcarca, donde de hecho viven 9 de los 13 afectados. Los dos pacientes, como en casos descubiertos anterioremente, comenzaron a sufrir los primeros síntomas de la enfermedad antes del día 3 de agosto. Por este motivo, los técnicos consideran que se trata de casos "retrospectivos", ya conocidos y que hasta ahora no se habían asociado con el foco del barrio de Vallcarca.
Las próximas horas serán decisivas para saber si el foco infeccioso continúa activo, puesto que ya hace siete días que no se advierte a ninguna persona que esté afectada en fase inicial. El periodo de incubación de la enfermedad se sitúa entre 2 y 10 días.
Pero mientras los técnicos hacen esfuerzos para determinar el origen de la enfermedad tampoco falta quien recuerda que en muchos casos nunca se llega a conocer cómo se inició o de donde salió un brote de legionela. El gerente de la Agencia de Salud Pública de Barcelona, Joan Guix, recordó ayer que "en más del 50% de los casos no se logra determinar el origen de un brote de legionela". Ello se debe a que las torres de refrigeración, caldo de cultivo ideal para la bacteria causante de la enfermedad, tienen condiciones muy cambiantes. Una torre infectada que contamina su entorno con las emanaciones de vapor de agua puede dejar de hacerlo en cuestión de minutos por un simple cambio de la temperatura del agua que contiene.
Pero los técnicos todavía esperan que las muestras de agua recogidas en las cuatro torres analizadas hasta la fecha den sus frutos y que permitan determinar si alguna de ellas es el origen del brote. "Se trata de instalaciones de refrigeración en edificios de utilización pública", se limitó a recordar ayer Guix, quien no quiso dar más detalles hasta que tenga "los resultados de los análisis en la mano".
De momento, y antes de tener los análisis, la Agencia de Salud Pública ya ha efectuado una desinfección de urgencia a todas las instalaciones con torres de refrigeración del barrio. "Se trata de una medida preventiva que en ningún caso puede servir para indicar el foco", recordó Guix.
Están dados de alta 5 de los 13 afectados, mientras que 8 continúan ingresados, 3 de ellos en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Sin embargo, Guix destacó que sólo uno de los tres ingresados en la UCI, lo está por causa directa relacionada con la legionela.
Guix hizo estas declaraciones después de una reunión de coordinación en el Consorcio Sanitario de Barcelona en la que participaron servicios implicados del Ayuntamiento, la Generalitat, el hospital de Vall d'Hebron, la Clínica Delfos y la Agencia de Salud Pública de Barcelona.
Los análisis realizados indican que todos los casos detectados hasta ahora comenzaron a mostrar síntomas entre el 20 de julio y el 3 de agosto. Ahora se está realizando un análisis epidemiológico más detallado para profundizar en las características de cada uno de los casos descubiertos.
Mientras se llevan a cabo estos trabajos, la Agencia de Salud Pública indicó ayer que no es necesario que los residentes del área afectada adopten algún tipo de medida preventiva, puesto que probablemente el foco del contagio ya se halla inactivo.
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