Infraestructuras niega que el vial Cabanes-Oropesa incurra en delito

El secretario autonómico de Infraestructuras, Pedro Marco, trató ayer de exculparse de cualquier posible responsabilidad en la ejecución de la carretera Cabanes-Oropesa, cuyas obras han provocado la apertura de un procedimiento por un presunto delito ecológico. Marco, que acudió a declarar en calidad de imputado, señaló al departamento de Medio Ambiente, ahora incluido en la Consejería de Territorio, como responsable de la autorización del proyecto, en ejecución, que podría afectar a una cavidad habitada por una especie cavernícola conocida como la gamba de Miravet. Marco aseguró que la "autoridad ambiental" autorizó el proyecto con el trazado propuesto por Infraestructuras. Este trazado ya hubo de ser modificado después de que el Grupo para el Estudio y Conservación de los Espacios Naturales (Gecen) advirtiera de que afectaba al parque natural del Desert de Les Palmes.

Tanto Pedro Marco como Sergio Pedrajas, jefe de la División de Carreteras, que también declaró como imputado, relacionaron la elección de la alternativa con el coste, más barato que el de las alternativas de los ecologistas.

El titular del juzgado de instrucción número 2 de Castellón tomó también declaración, como imputado, al jefe del Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental, Juan Martínez, quien sostuvo que todas las alternativas presentaban problemas geotécnicos e incluían zonas de impacto ambiental. Aún así, sostuvo que, a su entender, el trazado en ejecución es el "más adecuado".

Ninguno de los tres quiso responder a las preguntas del letrado del Gecen. Todos ellos arguyeron para justificar su negativa la "instrumentalización" del proceso.