Sudán, dispuesto a negociar una salida federal para Darfur

El ministro de Información de Sudán, Al Zahaui Ibrahim Malek, despejó ayer nuevas vías para una salida negociada de la crisis de la región de Darfur al afirmar que su Gobierno admite la posibilidad de compartir "el poder y las riquezas" de la zona con las fuerzas rebeldes. "Estamos dispuestos a un auténtico federalismo", aseguró, llamando al Movimiento de Liberación de Sudán (MLS) y el Movimiento de la Justicia y la Igualdad (MJI) a volver a la mesa de negociaciones.

Malek esgrimió como prueba de la disposición negociadora de Jartum el reciente acuerdo que ha puesto fin a 21 años de guerra civil. No quiso eludir el papel clave que tienen los recursos en el conflicto actual, confirmando que en Darfur se ha detectado petróleo, cobre y uranio. Sobre el desarme de las milicias Janjawid, el ministro explicó que se efectuará a medida que los rebeldes se reagrupen en campos controlados por una fuerza africana. El secretario general de la ONU, Kofi Annan, volvió ayer a advertir de las sanciones que recaerán sobre las autoridades sudanesas en caso de que no cumplan la resolución y no protejan a la población civil de Darfur.

Con el objetivo de restablecer el orden se desplegaron ayer en la región 5.000 policías llamados a colaborar con las fuerzas armadas, a la espera de que en breve se les una otro millar. Esta medida coincide con una grave acusación del oficial y líder árabe Abdullah Massar contra el MLS, según la cual los rebeldes habrían asesinado a 28 miembros de una tribu árabe y herido a otros 91 desde finales de julio en varios raids en los que pretendían hacerse pasar por milicianos Janjawid.