Recuperados los cuatros cadáveres del vehículo que cayó al Ebro en Amposta
Los servicios de emergencias rescataron durante la madrugada del martes los cuatro cuerpos sin vida de una familia de origen magrebí que el lunes por la tarde sufrió un trágico accidente de tráfico cuando circulaba por la AP-7 a su paso por Amposta (Montsià), donde su vehículo se salió de la vía y se precipitó en el río Ebro.
La familia, integrada por un hombre de 30 años de nacionalidad marroquí, una española de 22, un niño de 3 y una niña de tan sólo 1, residía en la localidad de La Llagosta (Vallès Oriental) y se dirigía a Marruecos para pasar sus vacaciones.
Al llegar al puente sobre el río Ebro en Amposta, circulaban por el carril rápido y allí ocurrió un accidente que el alcalde de la localidad, Joan Maria Roig (CiU), no acababa de entender. "Es la primera vez que pasa algo así", afirmó. El vehículo, un Mercedes de segunda mano relativamente nuevo que acababan de estrenar, circulaba normalmente cuando, de repente, se dirigió hacia la valla de protección de la izquierda de la plataforma, la rompió y se precipitó por el hueco que hay en ese puente en medio de los cuatro carriles de la autopista. Ahora se deberá determinar si la pérdida de control del conductor del turismo fue debida a un error humano o a un fallo mecánico.
El coche, que cayó de una altura de 15 metros, se hundió hasta una profundidad de siete metros y los cadáveres de los cuatro ocupantes del vehículo fueron encontrados en sus asientos. Al parecer, llevaban puestos los cinturones de seguridad reglamentarios.
Los buzos localizaron el coche hundido por las burbujas del aceite que se veían en el agua. Para el rescate no fue necesario cortar la autopista como se temía en un principio.
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