La oficina de información escolar barcelonesa atendió 3.000 consultas

La oficina de información escolar de Barcelona ha atendido un total de 3.000 consultas desde su puesta en marcha, el pasado mes de abril. El centro ofrece información y datos sobre los centros educativos públicos y concertados de la ciudad, los procesos de matriculación y las plazas escolares disponibles. Esta oficina, ubicada en el número 90 de la calle del Bruc, es una de las primeras iniciativas que lleva a cabo el renovado Consorcio de Educación de Barcelona, que, tras años de bloqueo, vuelve a ponerse en funcionamiento bajo el paraguas del Gobierno tripartito de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona.

En este centro se ubicará desde el 1 de septiembre la Comisión de Escolarización de Barcelona, que atenderá a los alumnos inmigrantes y gestionará la llegada de alumnos fuera del periodo oficial de preinscripción, la denominada "matrícula viva".

El consejo de dirección del consorcio ha aprobado también un avance del plan director, cuya primera fase se iniciará en septiembre, cuando se desplegarán las competencias de programación y distribución territorial de centros, y se aplicará la normativa de matriculación y gestión de los servicios educativos. En cuanto al resto de los puntos, se prevé que su desarrollo esté concluido en enero de 2005, de modo que antes del 1 de septiembre de 2006 el plan esté totalmente implantado, tal como prevén los estatutos.

Además de dar luz verde al avance del plan director, en los últimos seis meses el consorcio ha nombrado gerente a Josep Maria Rius y ha transferido las primeras inversiones en infraestructuras propias.

Aulas abiertas

Por otra parte, el próximo curso el Departamento de Educación pondrá en marcha un proyecto para alumnos de tercero y cuarto curso de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) con dificultades de aprendizaje. El departamento creará un total de 90 "aulas abiertas" que podrán acoger a más de 1.300 alumnos de entre 14 y 16 años, según explicó a Europa Press Pepita Coromines, de la Dirección General de Ordenación e Innovación Educativa. La iniciativa nace para combatir el fracaso escolar, que alcanza al 27% del alumnado, y su objetivo es ayudar a alcanzar las competencias básicas y obtener el título de graduado escolar.

Aunque algunos centros ya ofrecen desde hace un tiempo apoyo a estudiantes con dificultades, la medida pretende ir más allá e intentar "repescar a aquellos que no llegan al absentismo total o a desajustes graves", pero que "han perdido la motivación por el estudio", según Coromines. El programa cuenta con un presupuesto de 250.000 euros y las delegaciones territoriales acordarán con los centros su necesidad de disponer de "aulas abiertas" antes de septiembre.