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Reus proyecta un nuevo barrio que albergará un parque tecnológico

A medio camino entre un campus universitario y un polígono industrial donde quepan solamente empresas tecnológicas. Un nuevo barrio periférico de estas características es lo que acaba de presentar el Ayuntamiento de Reus (Baix Camp) en una área de dimensiones similares a la que tenía la ciudad en el siglo XIX y que agrupará en un futuro el hospital, facultades de Medicina y Nutrición de la Universidad Rovira i Virgili (URV), un nuevo palacio de congresos, docenas de empresas y 1.200 viviendas.

Un parque tecnológico de singulares características en Cataluña, pensado por empresarios, la comunidad universitaria y el consistorio. "Esto es valor añadido", dice el concejal de Promoción Económica Josep Morató (PSC), convencido de que es un proyecto que, a su juicio, combatirá con eficacia las deslocalizaciones.

El Ayuntamiento dispone, pero luego el mercado libre se deberá encargar de llenar el Tecnoparc, que es el nombre de este nuevo espacio de la ciudad. Conectado por dos autovías, a cuatro pasos del aeropuerto y de la futura estación del AVE, a cinco minutos del puerto de Tarragona, la zona parece inmejorable. Así lo acredita la circunstancia de que los tres polígonos que forman el Tecnoparc hayan pasado en poco tiempo de pequeñas parcelas sin utilidad en el extrarradio a manos de tres propietarios mayoritarios.

La urbanización de estos terrenos, de 156 hectáreas, ya ha comenzado y el plan de trabajo municipal prevé terminarla a finales del 2007. Aparte de la superficie, las cifras de este nuevo concepto de polígono industrial son también mareantes: 5.000 puestos de trabajo estimados, 3.500 alumnos universitarios, 3.000 más de formación profesional y una inversión estimada en infraestructuras y construcción de 1.000 millones de euros.

Suelo industrial barato

"Si este proyecto no interesa a las empresas es que este país está muerto", asevera Morató, y recuerda que el precio del suelo industrial en el área metropolitana de Barcelona es escaso y carísimo. En Reus, la misma superficie podrá costar entre tres o cuatro veces menos. Al margen de la actividad empresarial, el Tecnoparc dispondrá de un Centro de Innovación Empresarial, participado por la sociedad multisectorial que lo gestionará, destinado a ser una suerte de vivero de empresas tecnológicas, centro de formación y también de investigación.

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De momento, las dos operaciones más costosas para el Ayuntamiento, el traslado del hospital y del palacio de congresos, ya tienen solución económica. El Departamento de Sanidad, el consistorio, y la venta de una muy céntrica parcela donde el hospital proyectaba ampliarse, pagarán el traslado del centro sanitario. Para el Palacio de Ferias y Congresos, el Ayuntamiento tiene avanzadas las negociaciones con la firma Metrovacesa a fin de ceder el actual espacio para edificar un centro comercial. La cesión, por ella misma, debería pagar la hipoteca que significaría construir un nuevo edificio.

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